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Los niños de más de tres años no podrán seguir viviendo en la cárcel con sus madres

Los menores de diez podrán visitar a sus progenitoras en prisión con más frecuencia

Gabriela Cañas

222 niños viven hoy con sus madres en las cárceles de España. La Ley General Penitenciaria vigente permite a las presas mantener a su lado a los hijos menores de seis años. Pero ayer el Congreso aprobó reducir dicha edad hasta los tres años, "porque partir de entonces el nivel de consciencia niño en esas circunstancias puede acarrearle desequilibrios emocionales", como explicó ante el pleno el portavoz popular. Sin ningún voto en contra, los diputados aprobaron tres modificaciones legales por las que, además de la medida citada, los menores de diez años tendrán mayor acceso a sus madres presas, y las embarazadas, la misma baja maternal que cualquier trabajadora.

Rebajar la edad de los niños presos era una medida pedida hace tiempo por la Fiscalía General y el Senado en vista del progresivo aumento de mujeres reclusas en las cárceles españolas. Los datos de Asuntos Penitenciarios y la Generalitat de Catalunya indican que hay hoy 222 niños en las cárceles: 182 son menores de tres años y 40 de entre tres y seis.Reducir hasta los tres años la edad de los presos acerca a España a la legislación europea -alrededor de los dos años-, como recordó ayer la diputada de CiU y directora del Instituto Catalán de la Mujer, Joaquima Alemany.

'"Lo que nos preocupa ahora es que el Estado establezca las infraestructuras mínimas para que se lleve a cabo lo que se pretende con estas modificaciones: la plena evolución del niño fuera de la cárcel", dijo Diego López Garrido, de IU. "Porque si no fuera así, sería peor el remedio que la enfermedad".

Ignacio Gil Lázaro, del PP, destacó también el hecho de que ahora se obligue a las cárceles donde haya presas con hijos a tener "un local habilitado para guardería infántil". Aunque Isabel Alberdi, del PSOE, explicaba ayer que éste no es el único problema. "Es terrible comprobar que a veces los hijos de las reclusas tienen mejores instalaciones dentro que fuera de la cárcel".

"Reglamentariamente se establecerá un régimen específico de visitas para los menores que no superen los diez años y no convivan con la madre en el centro penitenciario", dice otro de los artículos aprobados ayer. "Estas visitas se realizarán sin restricciones de ningún tipo en cuanto a frecuencia e intimidad, y su duración y horario se ajustará a la organización regimental de los establecimientos".

Por último, las presas podrán disfrutar de las 16 semanas de baja maternal, como el resto de las trabajadoras, para sus trabajos penitenciarios a efectos de redimir peina.

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Sobre la firma

Gabriela Cañas
Llegó a EL PAIS en 1981 y ha sido jefa de Madrid y Sociedad y corresponsal en Bruselas y París. Ha presidido la Agencia EFE entre 2020 y 2023. El periodismo y la igualdad son sus prioridades.

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