Volkswagen deberá inyectar 40.000 millones en Seat para cubrir las pérdidas de este año

La vuelta de Seat a los beneficios se retrasa un año, a 1997. Así lo afirman dos fuentes del consorcio automovilístico, que dan por seguro que la empresa acabará este año con unas pérdidas entre 30.000 y 40.000 millones de pesetas. La empresa no espera beneficios el año próximo, en contra de lo previsto en el plan de enderezamiento hecho el año pasado. El grupo estudia una inyección de fondos para compensar pérdidas y reducir la carga financiera.

Diversas fuentes dicen que la cuenta de resultados no mejora debido básicamente a la fuerte carga financiera que soporta la empresa. La gran inversión en la fábrica de Martorell -300.000 millones- se está pagando cara y frena los resultados.Estas fuentes afirman que la acumulación de pérdidas hará necesaria una nueva ampliación de capital en la empresa por parte del socio mayoritario Volkswagen antes de final de año. Las pérdidas han consumido ya buena parte del capital. La ampliación es necesaria cuando se consume el 50% de los fondos propios o más, según la ley de S A. A más tardar, a final de año debe estar lista una ampliación de capital, afirman estas fuentes.

El endeudamiento de Seat se eleva a 440.000 millones de pesetas. Los fondos propios suman 22.578 millones. La empresa perdió 29.473 millones el año pasado y 151.000 en 1993.

Las ventas no terminan de salir adelante y han caído un 13% hasta julio, dado el estancamiento general del mercado. Para reforzar el área de ventas, Volkswagen movió recientemente a uno de sus hombres más valiosos, Detlev Schmidt, tras el éxito conseguido por éste en la filial checa Skoda. Schimdt y el vicepresidente de finanzas, Utz Claassen, son las dos piezas claves dentro del equipo que preside Juan Llorens.

Seat está muy pendiente de la decisión de la Unión Europea sobre el plan de ayudas a la empresa dado por el Gobierno y la Generalitat hace 15 meses. Estas ayudas ascienden a 46.000 millones de pesetas y se concedieron a través de créditos convertibles en subvenciones mediante inversiones tecnológicas. La empresa confía plenamente en que estas ayudas serán aprobadas en el marco de un plan de reducción del tamaño de la empresa contemplado por el Ministerio de Industria.

El apoyo de Arriortúa

Los sindicatos desconfían de los planes de Volkswagen. "Todo el mundo está pendiente de que se apruebe el plan de ayudas. Puede aprobarse teniendo en cuenta que la fábrica de Zona Franca está prácticamente cerrada. Allí sólo se hace el modelo Marbella y ahí la empresa se equivocó no cediendo este coche a Santana", dice esta fuente en referencia a la oferta hecha este año por Santana de hacerse cargo de la fabricación de este modelo.José Ignacio López de Arriortúa, jefe de compras de Volkswagen y consejero de Seat, es uno de los directivos del grupo que más está batallando para que Seat vuelva a ser rentable. Fuentes próximas a López dicen que éste se muestra tranquilo sobre las imputaciones sobre espionaje industrial lanzadas por General Motors. La Fiscalía de Darmstad puede decidir en la segunda semana de octubre si archiva el caso o actúa como acusación pública, afirman estas fuentes. López de Arriortúa, que hace unos meses recibió propuestas para trabajar en España, ha comunicado a sus íntimos que las acusaciones acabarán en nada y seguirá en el grupo.