Dimite el coordinador regional de IU en Extremadura

El coordinador regional de Izquierda Unida en Extremadura, Ricardo Sosa, candidato a la presidencia de la Junta de Extremadura en las últimas elecciones autonómicas, anunció ayer públicamente sudimisión. En el comunicado enviado a la prensa Sosa indica que en su decisión han influido "determinadas diferencias respecto al modo de hacer las cosas y resolver los conflictos" y "el interés en promover una corriente más alternativa, más rojiverdivioleta".

La dimisión la presentó el 3 de agosto, en una reunión de la presidencia regional de IU, si bien Sosa no la hizo pública hasta ayer "para evitar una situación de interinidad excesivamente larga". A su juicio, "no debe hablarse de un enfrentamiento con el PCE", aunque ésta parece ser la causa más probable de su actitud al haberse detectado evidentes discrepancias con otro miembro de la coalición, Manuel Cañada.

"En mi decisión de dimitir", comentó ayer Sosa a los periodistas, "han influido determinadas diferencias sobre el modo de hacer las cosas y de resolver los conflictos; el interés de promover una corriente más volcada hacia los movimientos sociales y más distante de la estructura de partido (...) y motivaciones personales", que rehusó detallar.

Tras insistir en que Izquierda Unida "debe poner el acento en algunos aspectos del quehacer político que en la práctica están descuidados", Sosa -integrado en IU como independiente- reveló que su renuncia fue presentada "y hecha efectiva" en la reunión de la Presidencia Regional de IU del 3 de agosto, aunque hasta ahora no trascendió a la opinión pública.

Seguirá en IU

"Deseo continuar ejerciendo el resto de mis funciones en Izquierda Unida y en el grupo parlamentario", anunció el dirigente de IU, quien puntualizó que "no debe hablarse de enfrentamiento con el Partido Comunista de España, cuyos planteamientos valoro positivamente, ni de división entre un sector duro y otro más moderado".Asimismo, Sosa recalcó que tampoco cabe especular con enfrentamientos personales, aunque admitió que su decisión puede generar "algunas tensiones".

"Una de las mayores riquezas de Izquierda Unida -subrayó- es la pluralidad, cuyas manifestaciones no son negativas, aunque sí los son las resoluciones destructivas de los conflictos que esa pluralidad necesariamente conlleva".

Ricardo Sosa destacó que si decisión no obedeció a un intento de "doblegar" a nadie, e insistió en que tampoco se trató de ur "órdago".

"No han variado mis posiciones políticas, mantengo una valoratión muy negativa respecto a la actuación de la dirección de PSOE; mantengo una actitud crítica son la dirección de los sindicatos mayoritarios, y sigo creyendo en la necesidad de la movilización", concluyó Sosa.