Operación Asfalto
Mientras condecoraba a la castiza Virgen de la Paloma, e alcalde de Madrid debió recibir un místico reproche por el abandono al que se han visto sometidas zonas de Centro como, Lavapiés. El caso es que, para purgar la falta,elegidor parece no haber encontrado mejor solución que asfaltar la calle de San Cosme y San Damián.Siendo ésta una de las escasas vías adoquinadas de la zona, presentaba por su pavimento no sólo Ven tajas estéticas, sino un elemento disuasorio para quienes entienden la calle como pista de pruebas de velocidad.
Dejar de utilizar alquitrán habría sido más ecológico, y ahorrar los pagos a la empresa privada Ferrovial habría permitido un uso, racional de una importante cantidad de dinero, aunque ciertamente podría haber sido peor si en la visión de estos gobernantes hubiese aparecido un paso subterráneo coronado por un chírimbolo. Gracias, virgencita.-
