Jueces y amenazas
Los grupos, de apoyo a ETA han reaccionado con rapidez digna de mejor causa al encarcelamiento del portavoz de Jarrai, Jon Salaberria y han pintarrajeado paredes de San Sebastián y otras localidades de Euskadi con amenazas al juez de la Audiencia Nácional-Carlos Buereu, que debretó la prisión con dicional contra este presunto delincuente. También han dejado a sus vecinos con unas cuantas cabinas tele ni , alguna marquesinas y algunas papeleras menos.. Héroica Iucha revoluciónaria la suya. Las Pintadas amenazadoras,son ya un hábito para estos abertzales. No podían ser menos en quienes emulan con entusiasmo a los fascistas de entreguerras. La similitud entre las pintadas de los grúpos nazis sean cabezas rapadas, Jarrai u otros, no es coincidencia.Las amenazas contra este juez son ante todo, baladronadas. Tanto Bueren como otros Jueces que luchan contra el terrorismo desde sus cargos en la Audiencia están siempre amenázados por ETA. Pero son, además, una amenaza a los jueces que, en condiciones de mayor indefensión ante los Asesinos, ejercen en el País Vasco. Uno de los elementos que más han favorecido la generación de. esa subcultura -de la violencia en tomo a HB y Jarrai ha sido la impunidad -o percepción de tal- con que ha contadó para su gamberrismo seudopolítico. Ese principio de él que la hace la paga" no se ha aplicado con -el rigor necesario a estos aprendices de terroristas que se creen héroes por quemar un, autobús o un contenedor de basuras. No hay -no podía haberla- relación entre los cinco. millones de fianza que Bueren ha impuesto a Salaberria con los daños materiales. que las bandas, que este representa han causado a particulares y al Estado. SÍ convendría de una vez por todas encontrar - -fórmulas, por las que los jóvenes vándalos de Jarrai y el lumpen de su entorno, paguen por sus tropelías de forma rápidal efectiva y sin tener que pasar porMadrid. Para ello hay que arropar á la Ertzaintza y a los jueces locales en situación personal mucho más difícil que Bueren y otros. Pero, también hay que exigirles a éstos que pongan coto a estos alevines.de terrorístas.. El rigor, sería pedagógico. Quizá hiciera. desistir a alguno, tan bárbaro como envalentonado de jugar con el bien comun y de enrolarse en aventuras criminales de mayor éntidad. Porque el vínculo entre el gamberrismo y el crimen eta aquí meridianamente claro. Hora, es de actuaren consecuencia.
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