Francia acumula precedentes de descensos por deudas

La Liga Profesional de Francia es la que nutre al fútbol europeo con más precedentes de sanciones que han implicado la pérdida de categoría de varios de sus clubes a causa de su endeudamiento. Esta misma temporada el Olímpico de Marsella ha vuelto a ser castigado con la pérdida de categoría por quiebra técnica de la sociedad. Debido a ello, el OM, pese a que ha sido campeón de Segunda, no ha podido consumar su retorno a la Primera División, categoría que perdió el año pasado debido al amaño de un partido de Liga en la temporada 1992-1993. Su caso, al igual que todos los acontecidos en Francia, como los descensos del Girondins de Burdeos, el Brest y el Niza en 1991 y el Nantes en 1992, es muy diferente a los del Celta y el Sevilla. La Federación y la Liga Profesional de Francia han elaborado una reglamentación que tiende más a la prevención que a la condena y a la muerte súbita. Todos los clubes están obligados a presentar planes de contabilidad y si existe un problema la primera medida es la prohibición de que efectúen fichajes.También existen casos de pérdida de categoría en los despachos en el fútbol alemán en el que el Hansa Rostock, primero, y el Dinamo Dresde después, han sido apartados de la Bundesliga por presentar contabilidades ficticias.

En Inglaterra, el Tottenham fue expulsado de la Copa en junio de 1994, además de ser penalizado con 12 puntos para la siguiente temporada y recibir una multa de 123 millones de pesetas por pagos irregulares a sus jugadores. Sin embargo, el club londinense recurrió a los tribunales y finalmente el castigo se redujo a hacer efectiva la multa.

Las quinielas italianas

En Italia, el Nápoles ha rozado esta temporada el descenso en el despacho, también debido a las dificultades económicas por las que atraviesa. En el calcio existen varios precedentes de descensos administrativos pero casi todos ellos relacionados con las quinielas ilegales. El más famoso fue el acontecido en 1980 y que envió al Milan a Segunda, además de suponer la descalificación de por vida del portero internacional Albertosi y por tres años, que al final se quedaron en uno, del delantero Paolo Rossi, entonces en el Vicenza. En 1993 fue el Perugia el equipo que. se vio relegado a Segunda B por intento de soborno.La UEFA es intransigente en cuanto a deudas de clubes se refiere. Un ejemplo: en 1990 el Estrasburgo se libró de estar tres años apartado de las competiciones internacionales gracias a que en última instancia pagó 12 millones de francos al Colonia como indemnización por el fichaje de Thomas Allofs.

En España los descensos administrativos se habían reducido siempre a la misma razón, el impago de las deudas con jugadores, caso del Burgos, el Almería, el Sabadell y el Alavés.