Barbero abandona la judicatura y deja sin resolver el 'caso Filesa'
El juez del Tribunal Supremo Marino Barbero dio ayer la espantada. El instructor del caso Filesa comunicó que abandona la judicatura, "con profunda amargura", por lo que considera una "infundada" falta de respaldo del Poder Judicial ante las críticas que le hizo el presidente de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra.Sus 44 meses de instrucción inacabada dejan una cruda herencia al juez que le sustituya: 19.000 folios de sumario. Atrás ha dejado un rosario de registros espectaculares, resoluciones con tendencia a coincidir con las campañas electorales, descalificaciones de las decisiones del propio Tribunal Supremo -tildó de "impresentable" el rechazo de la imputación de Alfonso Guerra- y 39 recursos de los inculpados en el caso Filesa.
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