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Forza Italia se alía con la izquierda ara acelerar la reforma de las pensiones

Un acuerdo sin precedentes entre Forza Italia (FI) y el Partido Democrático de la Izquierda (PDS) permitió ayer la aprobación en la Cámara de Diputados de una gran enmienda a los 11 primeros artículos de la ley de reforma de las pensiones. El Gobierno, que había convertido la enmienda en una cuestión de confianza al propio Gabinete, presentó ayer otras dos enmiendas sobre el resto de la ley a fin de acelerar la aprobación de un plan que se considera fundamental para el saneamiento del déficit público.

La votación de ayer dio un resultado de 284 votos favorables a la reforma, frente a 147 noes. Votaron sí los diputados del PDS, y todo el centro izquierda, incluido el sector del Partido Popular Italiano (PPI) afín a Gerardo Bianco. Votaron no Refundación Comunista y Alianza Nacional (AN.), separada por primera Vez de FI en un voto de confianza, que recuerda a la política italiana de las pasadas décadas, cuando los partidos de centro se ponían de acuerdo para marcar la política, dejando aislados a los extremos. Forza Italia y sus aliados centristas, el Centro Cristiano Democrático (CCD) y los populares de Rocco Buttiglione, se abstuvieron.Silvio Berlusconi aseguró ayer que esta diferencia de voto con AN era puramente "técnica" y que no tendrá ningún tipo de consecuencia para el futuro de la coalición de centro derecha conocida como el Polo de la Libertad. En esta y en otras materias, como las privatizaciones de empresas públicas, AN ha demostrado, no obstante, una orientación proteccionista y estatalista que choca con el liberalismo teórico de su aliado.

Berlusconi manifestó, además, a la prensa italiana que su apoyo a la ley de reforma es una muestra de responsabilidad con la delicada situación financiera del Estado italiano, ya que, a su modo de ver, la reforma acordada por el Gobierno de Lamberto Dini con los sindicatos resulta insuficiente. "Cuando volvamos al Gobierno, tendremos que darle otro buen empujón", dijo.

Dini afirmó ayer que, tras la aprobación de la nueva ley de pensiones, sólo esperará para dimitir a que el Parlamento apruebe una nueva reglamentación de la igualdad de acceso de los partidos a los medios de comunicación. Su posición coincide, así, con la de Berlusconi y se distancia de la izquierda que, antes de las próximas elecciones generales, querría que se aprobara, además, la introducción de un segunda vuelta electoral y una nueva ley contra la concentración de intereses económicos.

El Senado aprobó ayer, con la oposición de FI y AN, una ley que obliga a los miembros de futuros Gobiernos a vender todas sus participaciones superiores al 5% del capital en "industrias estratégicas". Por otra parte, el juez instructor de Milán desmintió que haya dictado más de una orden de búsqueda y captura contra el ex líder socialista Bettino Craxi.

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