'GIGOLOS' EN EL ESCAPARATE
Los escaparates de prostitutas del popular barrio rojo de Amsterdam han contado durante todo el día de ayer con unos inquilinos de excepción. A iniciativa de Mariska Majoor, ex prostituta que desde hace un año regenta un centro de información de la prostitución, más de 15 jóvenes varones se situaron a la vista de todos los viandantes ofreciendo sus encantos. La idea, según cuenta Majoor, surgió "para dar oportunidad a las mujeres para elegir al menos por un día lo que quieren". Reclutar a los jóvenes, que tienen entre 20 y 40 años, fue coser y cantar. "Un solo anuncio en el periódico y aparecieron todos los candidatos que necesitaban", explica Majoor. La respuesta de las mujeres, que pagaban aproximadamente 100 florines (unas 7.500 pesetas) por media hora, fue muy buena hasta que la calle se llenó de curiosos. A media tarde, el exceso de publicidad y la falta de intimidad les arruinó el negocio.-
