EL VINO, MUNICIÓN DE GUERRA
Más de 10.000 personas armadas con todo tipo de artilugios se dieron cita en Los Riscos de Bilibio, de Haro (La Rioja), para iniciar una guerra atípica donde las balas fueron miles de litros de vino -se calcula que cada participante disparó seis o siete litros- y los abatidos, todos aquellos reconocidos por el color grana de sus ropas. Jóvenes y no tan jóvenes, utilizando cubos, bidones, sulfatadoras, se impregnaron con los caldos del año en el día de San Pedro, en la ermita de San Felices, lugar donde la secular rivalidad entre la población riojana y la burgalesa de Miranda de Ebro se redime por estas fechas. El significado de la Batalla del Vino, explicó el concejal de Cultura, Joaquín Cegarra, es un acto de cordialidad donde los habitantes de Haro muestran su simpatía hacia el otro ahogándolo con el producto de la tierra. Guerra que este año ha contado con la presencia de las cámaras de la televisión pública danesa.-
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