Simone Veil se perfila como la primera Defensora del Pueblo Europeo

Doce días después de que se inicie su presidencia de la Unión Europea (UE) el Gobierno español corre el riesgo de llevarse el primer disgusto. El candidato de los eurodiputados socialistas españoles a Defensor del Pueblo Europeo, Álvaro Gil Robles, tiene pocas posibilidades de ser elegido para el cargo por el pleno del Parlamento Europeo del 12 de julio.La ex ministra liberal francesa Simone Veil se perfila como la aspirante con más posibilidades de arrebatar el puesto para el que se cerraron ayer las candidaturas.

El presidente del Gobierno español, Felipe González, se volcó, sin embargo, el 5 de junio en favor de Gil Robles, que fue Defensor del Pueblo en España, cuando recibió en la Moncloa a la mesa del grupo socialista de la Eurocámara, encabezada por la laborista británica Pauline Green.

El Europarlamento intentó primero, a principios de este año, elegir al defensor a través de su Comisión de peticiones. Entonces Gil Robles contó en las últimas vueltas con el respaldo unánime de los socialistas pero hizo tablas don el democristiano alemán Siegbert Alber. Fue entonces necesario cambiar el procedimiento de elección para deshacer el empate. La elección la hará ahora el pleno y a la segunda vuelta solo podrán concurrir los dos candidatos más votados.

La práctica unanimidad socialista se ha resquebrajado ahora porque el socialdemócrata y ombudsman de Finlandia Jacob Södermann ha decidido presentarse y cuenta con el apoyo de todos los eurodiputados escandinavos. A Gil Robles solo le han secundado por escrito españoles, portugueses y griegos.

Además, el grupo socialista va, probablemente, a dejar de ser el más numeroso de la Eurocámara con sus 173 diputados. Los 26 neogaullistas de la Alianza Democrática Europea y los 29 parlamentarios de Forza Italia están a punto de integrarse en el Grupo Popular Europeo (democristiano), que dominan los alemanes y que alcanzaría los 228 miembros.

A cambio de este traspaso, los democristianos alemanes del canciller Helmut Kohl retirarían a su candidato a defensor y se volcarían en apoyo de Simone Veil, para defensora, y de Nicole Fontaine, otra francesa cercana al presidente Jacques Chirac, para presidenta del Europarlamento a partir de enero de 1997, en la segunda mitad de la legislatura.

Quedaría así desbaratada la pretensión del Partido Popular español de colocar en 1997 a Abel Matutes o a José María Gil-Robles, hermano de Álvaro Gil-Robles, al frente del hemiciclo tal y como se lo dieron a entender los democristianos alemanes. El PP esgrimió este argumento para no votar al candidato español sino al alemán Alber.