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Cuatro 'cabezas rapadas' asaltan el puesto de helados de una familia camerunesa

Jan Martínez Ahrens

Fueron blancos del odio. Cuatro cabezas rapadas atacaron ayer un puesto de helados de Carabanchel propiedad de la camerunesa de 23 años Lucía Mbogo, inválida y de raza negra. Los asaltantes, al amparo de la noche -eran las seis de la mañana-, forzaron el tenderete con una palanca, sacaron su mercancía -cuatro cajas de helados- y la desparramaron por la plaza del Parterre. También robaron una caja donde la mujer guardaba 2.000 pesetas en monedas. Los rapados fueron sorprendidos durante su ataque por la Policía Local. Mbogo no tiene otro trabajo.

La Policía Municipal consiguió detener esa misma madrugada a dos cabezas rapadas -Enrique M. F., de 17 años, e Iván A. J., de 18-, que fueron conducidos a la comisaría de Carabanchel. No acabaron ahí las capturas. A lo largo de la mañana la Policía Nacional arrestó a los otros dos implicados. Los cuatro detenidos permanecían en la tarde de ayer en las dependencias policiales.Para la familia Mbogo, el asalto a la heladería ha supuesto un golpe bajo. La mujer, con un hijo de 8 años, apenas puede trabajar debido a su invalidez en ambas piernas. A falta de dinero, viven en casa de su madre, que trabaja en bares. Cuando llega el calor, la familia abre el puesto de helados. Lucía, que puede atender a los clientes sentada, se desplaza entonces hasta la plaza del Parterre. Los alumnos de los colegios cercanos constituyen su principal clientela.

Pese a la pérdida, el ataque de los rapados no borró ayer la sonrisa a los cameruneses.

Ya el año pasado sufrieron un atraco. Y también fue de noche. En aquella ocasión, sin embargo, los asaltantes eran una pandilla de delincuentes comunes. ¿Piensan que esta vez fue una agresión racista? "Sí, fue racista. Nos han visto que somos así y...", comentaba ayer Nicasio, de 8 años, hijo de Lucía. El zangolotino, de pelo corto, sorbía un helado rosa embutido en un plástico. Su tío Pastor Mico, de 25 años, meneaba la cabeza ante la afirmación: "Yo espero que sólo quisieran robar".

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Sobre la firma

Jan Martínez Ahrens
Director de EL PAÍS-América. Fue director adjunto en Madrid y corresponsal jefe en EE UU y México. En 2017, el Club de Prensa Internacional le dio el premio al mejor corresponsal. Participó en Wikileaks, Los papeles de Guantánamo y Chinaleaks. Ldo. en Filosofía, máster en Periodismo y PDD por el IESE, fue alumno de García Márquez en FNPI.

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