Críticas y oferta de diálogo a Pujol

El presidente del PP no ha hablado con Jordi Pujol tras el 28-M ni tiene una conversación prevista en su agenda. Tampoco ha recibido la felicitación personal de Felipe González, cuando él sí le telefoneó tras conocer los resultados de las generales de 1993.Ayer criticó como "política no correcta" el apoyo de Pujol "al mantenimiento de la situación actual", pero se mostró conciliador en su disposición al diálogo futuro, "que nunca se ha roto", con nacionalistas de centro derecha, y dispuesto a "no tomar en cuenta actitudes poco amistosas" durante la campaña electoral tanto de Pujol como del presidente del PNV, Xabier Arzalluz.

A título de ejemplo, el líder de los populares se mostró muy cauto en su actitud futura sobre la financiación autonómica y la cesión del 15% del IRPF. "No vamos a quemar etapas, vamos a ver cómo se plantean las cosas", advirtió a quienes interpretan que el PP vetará o bloqueará una prórroga del plazo inicial de dos años en la cesión del 15%.

El Gobierno tiene la mayoría en el Consejo de Política Fiscal y Financiera, recordó el presidente del PP, por mucho que el principal partido de la oposición controle desde ahora la mayoría de las comunidades autónomas. "Otra cosa es que se puedan tomar, decisiones (en el Consejo) en contra de la mayoría de las comunidades autónomas. Pero no sabemos cuál va a ser la posición del Gobierno. Por tanto, yo tampoco quiero prejuzgar la posición del Partido Popular".

Sí adelantó Aznar que su objetivo será buscar una renovación del sistema de financiación autonómica "lo más útil posible" para dos cosas. La primera, garantizar la responsabilidad general de todos ante la economía y la situación financiera del país. La segunda, "un proceso responsable y de corresponsabilidad fiscal".