La semana de los fantasmas

Nadie quiere oír hablar de las desgracias más recientes del madridismo. En vísperas del trascendental choque de mañana ante el Deportivo, la plantilla del Madrid huye de las comparaciones entre su situación actual y la que vivió en las últimas temporadas, cuando se dejó escapar dos Ligas a última hora en Tenerife. ¿Sobrevuela por el vestuario el fantasma de aquellos episodios? Por la forma en la que la encajaron algunos de los protagonistas, la pregunta supo a maldición, a que alguien poco menos que se había atrevido a nombrar la bicha. Todos, cada uno a su manera, vinieron a decir que no, que aquello ya está olvidado.Entre los jugadores hubo reacciones para todos los gustos. Sanchis, por ejemplo, se carcajeó, soltó un simple "ya" y se fue. Zamorano no se extendió mucho más. "Yo creo que no". O sea que... "Yo creo que no", no aceptó repreguntas. Martín Vázquez se mostró igualmente tajante: "No. Rotundamente, no". ¿Y en la gente? "Eso ya habrá que preguntárselo a la gente. Yo lo que vivo es mi propia experiencia. Y mi propia experiencia dice que tenemos un partido importante y nada más. Que nos jugamos la Liga, y nada más".

Fernando Hierro prefirió tomárselo a broma. ¿No nota que sobrevuela en el ambiente el fantasma de lo ocurrido las últimas temporadas? "¿Qué? La semana pasada era lo del paseíllo y ahora lo del fantasma. ¡Vaya semana nos espera! Nosotros estamos tranquilos, lo pasado pasado está, y fantasmas en el fútbol no hay nunca. Me temo que esta semana va a ser la del fántasma".

Milla, otro de los supervivientes de las jornadas trágicas de Tenerife, negó también los temores ("¡que va!, ¡ni mucho menos!"). Y trató de resultar convincente en su respuesta: "Existe mucha diferencia entre aquellos días previos y éstos. Entonces, el equipo venía de más a menos y ahora no, ha jugado regularmente durante toda la Liga. Ahora hay mucha más autoconfianza y, por tanto, recuperar los fantasmas no viene a cuento".

Amavisca es nuevo en el equipo y no vivió los negros pasajes de Tenerife. No nota ningún síntoma extraño entre sus compañeros, pero la pregunta tampoco le agrada en exceso: "Yo creo que eso de los fantasmas ya huele un poquito. Eso de los fantasmas ya se ha acabado, y más esta temporada, en la que parece ser que hemos acabado con muchos. Eso no tiene nada que ver con estos partidos".

Raúl no estuvo en Tenerife. Sus compañeros tampoco han hecho esfuerzos por informarle de lo que allí ocurrió: "Nadie piensa en lo pasado. Estamos mirando al frente y sabemos que tenemos que conseguir este título de Liga, para el año que viene hacer algo grande en Europa. Nosotros no tenemos ningún tipo de presión. Sabemos lo que, nos jugamos, pero conocemos también nuestras armas. Confiamos en que todo salga bien".

Se da la circunstancia de que en el Madrid actual hay personajes que vivieron las secuencias de los últimos años desde la otra. acera. Por ejemplo, Laudrup, que se benefició entonces, en el Barcelona, de los tropiezos del Madrid. No hay comparación posible, asegura: "Es un poquito diferente. Los años anteriores no había enfrentamiento directo y así es difícil comparar. Si nosotros jugáramos aquí y ellos en otros sitio... Es diferente. Y en el vestuario no noto nada raro. Yo no veo fantasmas".

También está el cuerpo técnico, Valdano y Cappa, que entonces ejerció de verdugo. Ángel Cappa da por olvidadas aquellas jornadas: "Es como si usted me dijera que porque alguien fracasó con un amor no se puede enamorar más. Naturalmente que está totalmente olvidado. Esto es otra situación, otra circunstancia, otra historia. El pasado, entre otras cosas, sirve para no repetirlo. No tiene nada que ver".

El ayudante de Valdano aseguró que la posibilidad de que aquellos fantasmas pudieran sobrevolar por la cabeza de sus jugadores no ha sido asunto de preocupación. "En absoluto", afirmó, "ni siquiera tocamos el tema. Ese caso uno lo toca cuando el periodismo se lo pregunta, pero no existe ese problema dentro del Real Madrid. A lo mejor si fuera el último partido, y tuviéramos que ganar en Tenerife, y las cosas fueran igual... A lo mejor entonces uno tendría que pensarlo, pero en este momento no hay nada. No hay ninguna coincidencia. No hay nada que uno pueda relacionar con aquel episodio".

Nadie, pues, quiere recuperar a la memoria aquellas derrotas. ¿Sobrevuelan los fantasmas de esos días grises? Dicen que no, pero tampoco les apetece hurgar mucho en el asunto.