Los directores generales del Banco de España no podrán pasar a entidades financieras en seis meses

El Banco de España atajó ayer la crisis que ha generado la salida de los directores generales Ángel Madroñero y José Pérez con su sustitución y con la promulgación de un reglamento que impide a los directores generales que cesen incorporarse a una entidad financiera durante un periodo de seis meses. Manuel Zamanillo ocupará el cargo de director general de Inspección, que, ostentaba José Pérez, y Raimundo Poveda pasará a ser director general de Regulación Financiera, que era una de las responsabilidades de Madroñero. Tras estos cambios, Pérez podrá incorporarse al Banco Bilbao Vizcaya (BBV) como director general de Mercados a partir del 1 de diciembre de este mismo año.

El Banco de España ha aprovechado los cambios para modificar ligeramente su organigrama. La Dirección de Inspección no sufre alteraciones. Sí las habrá en la de Instituciones Financieras, Personal e Intervención, que ocupaba Ángel Madroñero, y que se jubila con 66 años aunque la ley le permitía estar cuatro años más en su puesto. Esa dirección quedará desgajada y Raimundo Poveda, nuevo director general, desempeñará las funciones de Regulación Financiera que tenía hasta ahora como director general adjunto. La otra parte quedará bajo la responsabilidad de Enrique Gallegos, como director general adjunto de Régimen Interior.Además de las dos direcciones generales referidas, el Banco de España cuenta con otras tres, que ocupan Luis María Linde (Internacional), Gonzalo Gil (Operaciones) y José Luis Malo de Molina (Estudios).

Consejo de Gobierno

Los cambios fueron aprobados ayer por el consejo de Gobierno del banco emisor tras habrt sido acordados un día antes por la comisión ejecutiva (Véase EL PAIS de ayer). El Banco de España decidió, además, aprobar el reglamento, que prohíbe a los directores generales que cesen en su servicio incorporarse a alguna entidad que esté sujeta a su supervisión, ni recibir de ellas retribución de ningún tipo en un periodo de seis meses. Tras conocerse la semana pasada la marcha de Pérez al BBV, se suscitó en diversos círculos la posibilidad de elevar esos seis meses de cuarentena a dos años, que es el periodo de reserva previsto para el gobernador y el subgobernador. FinaImente, el Banco de España ha optado por mantener los seis meses. En Inglaterra, ese periodo es de tres meses, mientras que en EE UU no existe.

Durante la cuarentena, los directores generales percibirán una indemnización del 80% de su retribución como director general. "No habrá lugar a la misma", según el banco, "en caso de que el interesado pasara a desempeñar de forma remunerada cualquier puesto de trabajo no incompatible".

José Pérez, que está ligado al Banco de España desde 1972, anunció al gobernador del. Banco de España que dejaba la entidad al aceptar una oferta del BBV para encargarse de la dirección general de Mercados. De acuerdo con el reglamento aprobado ayer, Pérez podrá incorporarse a su nuevo puesto a partir del 1 de diciembre de este año.

El nuevo responsable de la Inspección, Manuel Zamanillo, tiene 65 años e ingresó como técnico en el Banco de España en 1952. En 1968 hizo el curso de diplomado para la Jefatura, y fue nombrado jefe en 1970. En 1972 ingresó en la Inspección de Entidades de Crédito y Ahorro y en 1981 fue nombrado inspector jefe de entidades de crédito y ahorro, subjefe y, posteriormente, jefe. En 1990 se le nombró subdirector general, continuando con la jefatura de inspección. En estos años se encargó, precisamente, de supervisar Banesto, entre otras tareas.

Raimundo Poveda, el otro director general, cuenta con 58 años e ingresó el instituto emisor en 1963 pasando por el Servicio de Estudios, Supervisión Bancaria y Política de Banca. Desde su última responsabilidad ha sido miembro de grupos comunitarios de supervisión bancaria (de 1986 a 1994) y desde 1990 es miembro del Comité Consultivo Bancario de la UE.

Enrique Gallegos, de 46 años, se incorporó al Banco de España en 1972. En 1976 accedió a la Inspección interviniendo en varias actuaciones en la crisis bancaria de aquellos años. Fue responsable de la inspección del Exterior, Santander y Popular, en distintos momentos. Desde 1989 era jefe de la oficina de personal y del centro de formación.