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28 MAYO

Nervios, abucheos y una lenta victoria

La victoria del Partido Popular en la Comunidad de Madrid estuvo llena de sobresaltos. El triunfo quiso hacerse de rogar para Alberto Ruiz Gallardón, candidato por tercera vez a la presidencia de Madrid.Los resultados de los primeros sondeos a pie de urna nombraban a Ruiz Gallardón presidente de la Comunidad de Madrid, con una holgada mayoría de 55 escaños sobre un total de 103. De esos primeros momentos datan las fotos de Ruiz Gallardón con el alcalde, con las esposas de ambos, María del Mar Utrera y María Eulalia Miró, respectivamente. Eran las nueve de la noche y Ruiz Gallardón no podía contener sus propias manos, que se llevaba a lacara en un gesto contenido de alegría. Ahí también llegó el primer abucheo de las bases enardecidas del PP. Fue cuando Pío García-Escudero, presidente del partido en Madrid, pidió desde el balcón de Génova, 13 -Álvarez del Manzano aun lado; Ruiz Gallardón, al otro- un respeto para los adversarios. Abucheos que los tres políticos intentaban acallar con expresivos gestos de sus manos.

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Eran momentos de regocijo no siempre contenido. Juan Barranco, candidato a alcalde por el PSOE, y José Acosta, presidente del partido en Madrid, mostraron su disgusto porque un grupo muy reducido de militantes del PP se dedicara a incordiar ante las puertas de la Federación Socialista Madrileña en la calle de Santa Engracia. "Felipe, jodeté, España es del PP", gritaban militantes del Partido Popular desde sus coches.

Pero entonces llegaron los primeros datos de escrutinio y cundió el pánico en la calle de Génova. Eran las 22.30 horas cuando los candidatos empezaron a hacer mutis por el foro. Media hora duró el calvario para el definitivo triunfador de la noche, Alberto Ruiz Gallardón, que de presidente se volvía a ver sentado en el banco de la oposición con 51 diputados, insuficientes para afrontar la suma del PSOE e IU. El fantasma de las últimas elecciones generales de 1993, cuando el Partido Popular cantó su victoria antes de tiempo, planeaba en la sede del partido.

Hasta la medianoche no recuperaron el ánimo los candidatos populares. Algunos, como el concejal madrileño de Seguridad, Carlos López Collado, tardaron aún en recuperarse del susto. Pero todo quedó en eso, en susto. Fue cuando se supo que con el 88,37% de los votos escrutados -¿cómo es que no hubo datos fiables antes?-, Alberto Ruiz Gallardón conseguía, efectivamente, la mayoría absoluta. Las bases del PP pudieron aplaudir a rabiar a sus candidatos, y a José María Aznar, que generó el delirio entre su público. Y abuchear otra vez al enemigo.

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