Grass
Leyendo la crónica de su corresponsal sobre la última novela de Günter Grass, Un amplio campo, que es, al parecer, una de las novelas mayores de este autor, uno se pregunta qué es más importante si la novela o el hecho de que el crítico-mandarín de las letras alemanas Reich-Ranicki le haya dedicado un par de frases más o menos elogiosas. Eso, al parecer, y no el talento de Grass o su capacidad de vencer al tiempo, es lo que consagra la novela en su periódico, pues le dedican la primera página de la sección de cultura.Lo malo es que éste no es el único ejemplo. De un tiempo a esta parte se diría que lo único que importa del arte es el número de premios que sea capaz de conseguir o adjetivos elogiosos de los críticos levantar. ¿Por qué no buscan ustedes cosas más interesantes que contar? A mí se me ocurren unas cuantas preguntas sobre la novela de Grass. Difícilmente las hubiera podido resolver en su periódico, ya que la paráfrasis de las dos frases del crítico alemán ocupó... la mitad de la crónica-
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