El PSOE intentará cerrar hoy un pacto global con CIU para desbloquear las leyes fiscales

El PSOE quiere cerrar hoy un pacto global con los nacionalistas catalanes para dar un impulso definitivo a los tres proyectos de ley sobre temas fiscales que se encuentran en trámite parlamentario. Se trata del delito fiscal, que entró en el Congreso hace diez meses, la Ley General Tributaria, hace seis, y el impuesto de sociedades, más recientemente. Con ello, quedaría despejado el camino para la negociación del Presupuesto de 1996 que se prevé especialmente difícil. No se descarta que, si las elecciones catalanas se adelantan al otoño, tenga que prorrogarse el presupuesto de 1995.Hoy está previsto un almuerzo entre el presidente del grupo parlamentario socialista Joaquín Almunia, la diputada de este partido Mercedes Aroz, el presidente del grupo parlamentario de CiU, Joaquim Molins, y el diputado de esta coalición Josep Sánchez Llibre, para desbloquear las leyes fiscales en trámite parlamentario. Mientras Almunia aseguró a este periódico que el clima de entendimiento es bueno, fuentes de CiU señalaron el mal precendente del incumplimiento por parte del PSOE del acuerdo sobre el delito fiscal.

Fuentes socialistas reconocieron lo trabajoso que resulta atar en corto a los nacionalistas catalanes. La experiencia de los Presupuestos del pasado año y de las leyes fiscales ahora en trámite es que "no se contentan con acuerdos generales y hasta el último momento no estamos seguros de cómo van a votar".

Preocupación de Hacienda

Desde el punto de vista del Mnisterio de Hacienda, la preocupación también es palpable. El proyecto de ley de refórma parcial del Código Penal, enviado al Congreso el pasado agosto, aún no ha sido aprobado. Los, expedientes de delito fiscal entre cinco y 15 millones van a marcha lenta, a la espera de que se determine la cuantía máxima a partir de la cual un fraude es puede entrar en la vía penal.

Hacienda se ha visto también obligada a suspender la ejecución de las sanciones en la vía administrativa hasta que se apruebe la reforma de la Ley Tributaría. Hasta ese momento, la inspección tampoco puede pedir a las entidades financieras información sobre el origen y destino de los movimientos de cuentas bancarias, cheques y otras órdenes de pago.

En cuanto a la reforma del impuesto de sociedades, socialistas y catalanes han alcanzado ya un principio de acuerdo que prevé un trato fiscal más favorable, para las pequeñas y medianas empresas. Pero se da por casi seguro que el plazo límite de presentación de enmiendas se prorrogue más allá de la fecha inicialmente fijada, que era hoy.

Las dificultades entre CiU y el PSOE saltaron con el frustrado acuerdo para fijar el límite del delito fiscal en 15 millones y en un 20% de la cuota pagada, que también suscribió el PP. El PSOE se desdijo del acuerdo porque en Hacienda está en contra del 20%, pero dijo que apoyaría la propuesta que presentase otro grupo. CiU ha bajado ahora ese porcentaje al 15% y lo considera ya "una cuestión de principio". La diputada socialista Mercedes Aroz, señala que se quiere "mantene los aspectos sustanciales", es decir, en los 15 millones y en la llamada excusa absolutoria.

En cuanto a la Ley General Tributaria, que esta semana se vota en el Pleno del Congreso, Sánchez Llibre mantiene otra "cuestión de principio" en el llamado fraude de ley, porque afecta a la seguridad jurídica de los contribuyentes". Aroz admite que este aspecto ha causado reacciones muy negativas, aunque advierte que "es uno de los caminos que en la actualidad utilizan los grandes defraudadores". El PSOE ha retirado una enmienda que había planteado al respecto.

Que en todos estos temas se llegue a un acuerdo es clave para empezar con buen pie la difícil negociación de los presupuestos del año que viene. Pero algunos diputados catalanes han señalado que las elecciones autonómicas, previstas para la primavera de 1996, pueden adelantarse a este otoño, dependiendo de los resultados del 28 de mayo. Si es así, no se descarta una prórroga del Presupuesto de 1995.