Alvarez del Manzano cree que ha despertado a la ciudad

J. C. El alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano, mantiene una tesis distinta a la que, mayoritariamente, se aprecia de él y de su gestión. Así, cree que difícilmente podría estar en otro sitio mejor. Asegura que ya forma parte de la escena nacional y que no precisa de más promociones internas en el PP. Opina que, con sus decisiones, influye en todo el país, como los regidores de París o Nueva York, y se considera "más conocido e importante que cualquier, diputado o ministro, salvo tres o cuatro". "Nuestro Ayuntamiento es el primero y un escaparate de la gestión del PP", proclamó en el ecuador de su mandato. También dice que su principal logro es "haber puesto en marcha, Madrid, sacarlo de su letargo".

Los grupos políticos del PSOE e IU, tanto del Ayuntamiento como de la Comunidad, ya han avisado que centrarán su campaña en achacar a José María Aznar y Alberto Ruiz Gallardón la diferencia entre lo que dicen cuando prometen y lo que hacen cuando gobiernan. Siempre con el ejemplo de un Madrid que ven en estado comatoso, especialmente en la suciedad de las aceras y las calzadas.

Como réplica a la primera queja, el PP ha promovido hasta el número dos a Esperanza Aguirre , concejal de Medio Ambiente y Cultura. La edil se coloca en la mejor posición para el relevo. A la invasión de coches, dobles filas y atascos, el alcalde piensa responder con una superconcejalía que agrupe Tráfico y Policía Municipal.

Ruiz Gallardón, cuando se le acosa para que ponga tres ejemplos sobre iniciativas que asumiría si gobernase, dice que podría elegir 33. Cuando se le atosiga, concreta una: "El presidente de la comisión de vigilancia de los contratos municipales es de la oposición". Esa realidad es así desde que gobernaba Juan Barranco.

"Ocasión perdida, se opina en el PSOE cuando se hace abstracción de la figura de Barranco. "Ahora que vamos a perder era el momento de haber acometido una profunda renovación porque es verdad que algunos llevamos muchos años", admite uno de los ediles más cercanos al ex alcalde socialista. La lista de los socialistas ha sido retocada, pero a partir del décimo puesto.

¿Por qué no se han cambiado las caras más visibles?: "Los pactos entre las distintas familias de la Federación Socialista Madrileña lo han impedido. Los dos líderes, tanto Joaquín Leguina como Barranco, lo han puesto muy difícil. Si Leguina de verdad hubiera renunciado a la reelección, habría sido más fácil convencer a Barranco".