_
_
_
_

Los grapos que son juzgados en Madrid confundieron a un funcionario jubilado con un empresario millonario

, A Alejandro Gómez Durán, un funcionario jubilado, le extrañó que el operario del gas que quería revisar un día de 1990 la instalación de su piso, en la avenida madrileña de la Reina Victoria, luciese, bajo un impecable mono azul de estreno, "una camisa y una corbata de gran calidad". También, que preguntase dónde estaba cuando debería haberlo sabido. En cambio, casi ni se asombró cuando la policía le informó que los grapos que están siendo juzgados ahora en la Audiencia Nacional habían pretendido secuestrarle al confundirle con un empresario millonario del paseo de la Castellana.

Los equívocos que sufría por culpa de su homónimo, según declaró ayer, eran, en efecto, frecuentes. Más de una vez había recibido llamadas interesándose por la compra o la venta de cualquier parcela. Incluso él mismo le telefoneó en varias ocasiones, "siempre en vano", para que tomase alguna medida que los evitara.

En esa oportunidad, sin embargo, el asunto podría haber sido realmente grave para él. Los terroristas creían que era un adinerado y que guardaba en su vivienda -"¿dónde?", no pudo por menos que ironizar- 2.000 millones de pesetas. Así, uno se hizo pasar por empleado de la compañía del gas para poder hacer un plano de ella. La policía, que la había controlado en todo momento, truncó a tiempo la errónea tentativa.

Durante la sesión de ayer también declararon agentes que participaron en detenciones y registros, así como propietarios de casas alquiladas por los grapos.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_