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Reportaje:

El estadio de Canillejas busca la gloria

Madrid se prepara para competir por los Campeonatos Mundiales de Atletismo de 1997

José Manuel Romero

Sin dinero y sin obras, la gloria deportiva es imposible. Para alcanzar el honor de organizar la competición más sobresaliente del atletismo mundial, que se celebra cada dos años, hacen falta en Madrid 1.200 millones de pesetas, algunas cuadrillas de albañiles trabajando a destajo y buena suerte.

Los que mandan en la Comunidad han aceptado el costoso reto para celebrar el mundial. La Administración regional, dirigida por los socialistas, ya tiene los planos precisos para salvar el primer obstáculo: aforo insuficiente. Los 5 millones de kilos de hormigón de la apabullante peineta que da forma al estadio de atletismo de la Comunidad, en el barrio de Canillejas, son escasos. Sólo garantizan asiento a 20.000 espectadores y, según las normas internacionales, el recinto de un campeonato del mundo de atletismo debe tener un aforo mínimo de 60.000 plazas.

Los sevillanos Antonio Cruz y Antonio Ortiz, arquitectos que idearon y pusieron en pie La Peineta, han entregado ahora un proyecto de ampliación del estadio (ver gráfico) que descarta la construcción de nuevas gradas monumentales y opta por rellenar de cemento y escalones el cuenco de hierba que rodea la pista.

40.000 nuevos asientos

Junto a esta obra, que regalará al estadio 40.000 nuevos asientos y cuesta 1.200 millones de pesetas, los dirigentes madrileños han reservado terrenos públicos suficientes -hay . 120 hectáreas de uso deportivo- para sembrar la pista de calentamiento de ocho calles y 400 metros de longitud que exige la Federación Internacional de Atletismo (IAAF). A esta zona destinada a la preparación previa a la competición podrán acceder los atletas a través de un túnel ya construido que parte del mismo estadio.

Los socialistas están convencidos de que este proyecto les permitirá competir por la organización del mundial. "Sabemos que esta idea de ampliación para lograr las 60.000 plazas cuesta 1.200 millones de pesetas. Si conseguimos vencer en la pugna por celebrar en Madrid el campeonato, las obras, que también incluyen una nueva pista de calentamiento, se iniciarán de inmediato. Si no es así, nosotros mantendremos el compromiso de mejorar las condiciones del estadio, aunque los plazos para ejecutar ese plan serán menos urgentes", cuenta Jaime Lissavetzky, consejero de Educación y Cultura de la Comunidad de Madrid.

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El Gobierno del socialista Joaquín Leguina ha empezado ya a preparar la candidatura. Primero deberán convencer a la Federación Española de Atletismo para que. registre a Madrid como candidata a la organización de los mundiales de 1997. Competirán con los dirigentes locales de Barcelona, también socialistas, que, aunque todavía no se han manifestado con claridad, reconocen que el acontecimiento deportivo les hace especial ilusión. Sevilla, por su parte, también pretende recibir a los principales atletas, aunque dos años después, en 1999.

"Nuestra primera meta está en el 5 de mayo", advierte Lissavetzky. Ese día, la Federación Española de Atletismo dirime el conflicto entre las tres ciudades. Si Madrid gana esta pugna nacional, el equipo de Joaquín Leguina buscará en Mohtecarlo, sede de la Federación Internacional de Atletismo, el éxito definitivo. "Nuestra propuesta se sostiene en tres pilares: el equipamiento deportivo, la capacidad turística y la infraestructura de transportes", explica el titular de Educación y Cultura.

En la Consejería de Transportes han empezado a estudiar las fórmulas para mejorar accesos, aproximar el suburbano hasta el estadio y ampliar la capacidad del estacionamiento. Julián Revenga, consejero de Transportes, asegura que la línea 7 del Metro -que arranca en la avenida de América para terminar en Las Musas (San Blas)- puede prolongar su servicio hasta las proximidades de La Peineta. Este corredor subterráneo permite conexiones con la línea 8 (hasta Fuencarral), la línea 9 (desde Herrera Oria hasta Pavones) y la línea 4 (desde Argüelles hasta Esperanza).

Los accesos por carretera al estadio de atletismo también serán ampliados y mejorados. "Incluso analizaremos la posibilidad de habilitar un nuevo acceso desde la M-40", anuncia Revenga. El tramo este del segundo cinturón de Madrid discurre tan sólo a 200 metros del recinto deportivo.

Los huecos de aparcamiento también se incrementarán para poder atender la demanda ocasionada por la ampliación del estadio, que triplicará su capacidad. Turín, con un recinto para 60.000 espectadores, ofrece 4.000 plazas de estacionamiento. Nápoles, cuyo estadio tiene 81.000 asientos, presenta un aparcamiento para 3.100 coches.

En La Peineta de Canillejas existe actualmente una gran explanada donde caben ordenadamente 1.317 coches y 24 autocares. En el interior del estadio también se guardan 600 plazas de aparcamiento.

Empuje de la candidatura

La capacidad hotelera de Madrid (4.000 camas en los,alrededores del estadio y 80.000 en el conjunto de la región) garantiza que los visitantes (atletas y aficionados) no sufrirán buscando alojamiento. "Además, tenemos los mejores museos del mundo, por lo que añadimos al atractivo deportivo la atracción cultural de nuestra ciudad", manifiesta ufano Lissavetzky.

Las elecciones locales y regionales del próximo 28 de mayo no alterarán los planes respecto al Mundial de Atletismo de 1997, según los dirigentes políticos consultados por este periódico. Tanto los socialistas, que gobiernan la región desde hace 12 años, como el Partido Popular, primer favorito para administrar la Comunidad en los próximos cuatro años, empujarán con dinero y declaraciones la candidatura madrileña.

"La federación internacional puede despejar la duda sobre el Mundial 97 el próximo 17 de mayo en el consejo directivo que hay convocado. O hacerlo en agosto durante la celebración del campeonato en Gotemburgo", explica Lissavetzky. "Sea una fecha u otra, los comicios políticos no tienen por qué incidir en la apuesta madrileña".

El PP promete un graderío gemelo

J. M. R. Si el Partido Popular gana las elecciones, el Estadio de Atletismo de la Comunidad de Madrid tendrá dos peinetas: el graderío gigante e inclinado con capacidad para 20.000 espectadores que existe, en la actualidad, y uno nuevo que nacería enfrente. Ese es el compromiso de Alberto Ruiz Gallardón, candidato del PP a la presidencia regional, que propone cubrir de cemento el anillo del estadio de atletismo, actualmente protegido tan sólo por uno de sus lados. "Los laterales", explica Juan Soler Espiauba, portavoz de Deportes del PP, "tendrían una altura proporcional a la que tienen actualmente".

El Partido Popular también quiere luchar para conseguir los mundiales de atletismo. "Con estos campeonatos, el estadio de la Comunidad de Madrid ganaría el prestigio internacional que necesita para poder organizar reuniones atléticas a lo largo del año". Sobre el resto de infraestructuras externas de La Peineta, los populares confían en el trabajo desarrollado hasta ahora por los socialistas. "Queremos ampliar los aparcamientos y los accesos en función de los proyectos existentes".

El proyecto arquitectónico de ampliación saldría a concurso. Los autores del estadio, Antonio Cruz y Antonio Ortiz, tendrían, por tanto, que luchar por continuar su obra. "A lo mejor el proyecto no corresponde a los mismos arquitectos, habrá que hacerlo conforme a la ley", dice el portavoz del PP.

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