La policía atrapa a 'Los niños de la Typhoon'
Una banda de menores perseguía a repartidores de pizzas en Sevilla para robarles sólo la comida
Prácticamente todos los repartidores de la tres pizzerías de la zona de la Macarena -Telepizza, Pizza Hut y Pizza Gallery- han sufrido el acoso de los niños de la Vespa Typhoon de color amarillo. Actuaban desde el mes de enero, preferentemente los fines de semana, a partir de las ocho, cuando caía la noche. Patrullaban por la calle Muñoz León y la Ronda de Capuchinos. Otras veces se parapetaban tras la muralla de la Macarena."Siempre que salías a repartir ibas con miedo. Antes o después aparecían en la Typhoort amarilla. Siempre iban tres, unos niñatos. Debían llevar el motor trucado porque siempre nos alcanzaban por más que aceleráramos o nos saltáramos semáforos. Intentaban abrirte el cajetín, o bajarte de la moto. Cuando te paraban, a veces te sacaban una navaja mientras los otros vigilaban. Parecía que lo hacían como deporte. El peor de todos era el que conducía, que tenía la piel muy oscura". Juan, de 21 años, repartidor de Telepizza, reconoce que nunca le quitaron el dinero. "Sólo se llevaban las pizzas y sobre todo amenazaban con reventarte la moto si no se la dabas", explica.
Lo intentaban prácticamente todos los días, hasta seis o siete veces por jornada. "Iban como locos, te golpeaban la moto, te cerraban. Si intentabas enfrentarte con esos enanos, te sacaban la navaja o te decían 'si me tocas vas a desear la muerte' o 'va a venir mi hermano y todo el Polígono Norte", continúa Juan. "Yo les decía '¿no vais al colegio? y me decían 'ya hemos acabado los estudios".
Francisco Javier y Miguel Ángel, repartidores de Pizza Hut, corroboran que salían a la calle tensos y con miedo. "Era imposible escaparse de ellos; yo tengo una moto de 90 centímetros cúbicos y ellos con la suya, de 50, siempre me alcanzaban", explica Francisco. "Lo que no entiendo es para qué querían tantas pizzas, porque han llegado a robar hasta siete en un mismo día. Una vez me devolvieron una de vegetales porque no les gustaba", recuerda Miguel Ángel. "A veces venían cuatro o cinco en dos motos", matiza. Todos los repartidores coinciden en un punto: casi nunca se llevaron el dinero.
La última vez que los vieron iban en un Ford Escort rojo de Sevilla, denunciado como robado. Era el 5 de marzo. Los agentes del grupo 15 de Delincuencia Urbana localizaron el automóvil y a dos de los niños en el Polígono Norte, un conflictivo barrio de Sevilla. Dos de los chavales, de 11 y 13 años, fueron detenidos como supuestos autores de once robos con intimidación -los que constan como denunciados en la comisaría de la Macarena- y han sido puestos a disposición de la fiscalía de menores de los juzgados de Sevilla, según la Jefatura Superior de Policía. Los dos han sido reconocidos por varios testigos sin ninguna duda.
Fuentes de la fiscalía explicaron que se tiene constancia de que los niños de la Typhoon eran al menos seis, casi todos ellos residentes en el Polígono Norte, con familias conflictivas y nula escolarización. El mayor de los dos detenidos, de apellido de origen eslavo, ha sido internado cautelarmente en el centro tutelar La Jara, de Alcalá de Guadajara. Las citadas fuentes indicaron que este menor ya tenía otros expedientes por delitos anteriores, "pero esto último ha supuesto un salto cualitativo muy fuerte".
El otro niño ha quedado a disposición de los servicios sociales de la Junta de Andalucía. Las pesquisas continúan. Las mismas fuentes de la fiscalía explicaron que en el caso de que este delito hubiera sido cometido por un adulto, hubieran pedido una pena de al menos cuatro años. "El acto que cometían, amenazando con un arma blanca, es un delito muy peligroso", alegan.
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