RTVE perdió 100.000 millones en 1994

Una cifra de pérdidas en torno a los 100.000 millones de pesetas en 1994 la cuantía exacta no ha sido confirmada por RTVE y una deuda que alcanza los 245.000 millones, sumadas a las expectativas de consolidación de las cadenas privadas, han situado al ente estatal de radio y televisión ante la necesidad de abordar un plan de viabilidad que no se planteó a largo de los cinco años transcurridos desde la ruptura del monopolio.En los documentos puestos sobre la mesa del Consejo de Administración de RTVE se dibuja un nuevo modelo de radio y televisión estatal, que costaría una media de 7.500 pesetas anuales por cada hogar durante los próximos cinco años. Cifra que de bería elevarse á 13.500 pesetas por hogar, si el Estado asumiera también la deuda acumulada por RTVE en ese mismo período.

Incluso en este segundo supuesto, la cantidad resultante es inferior a lo que cuesta a los contribuyentes el sostenimiento de la radiotelevisión pública en la mayoría de los países de Europa. Por ejemplo, en Alemania, la televisión pública -que tiene ingresos por publicidad limitados- cuesta una suma equivalente a, 23.000 pesetas por hogar. Precisamente la rentabilidad, de ese dinero es uno de los más vivos debates políticos abiertos actualmente en Alemania. Los franceses contribuyen con unas 15.000 pesetas por hogar y año, y los británicos aportan en torno a 17.000 para sostener la BBC, que no tiene publicidad.El economista del grupo de consejeros elegidos a propuesta del PP, José Vila, no tiene dudas sobre la causa del grave endeudamiento de RTVE. "El Gobierno dejó, que RTVE se endeudara para no aumentar el déficit público", afirma Vila. "En la televisión hemos pasado por la ley del péndulo: de un monopolio del mercado publicitario que permitía nadar en la abundancia, a la creación de la televisión privada, sin ningún tipo de plan para que la radio y la televisión pública pudiera subsistir, sin subvención y viéndose obligada a reducir a la mitad sus ingresos por publicidad".Cinco años atrásLa propia dirección general de RTVE apunta, en los documentos sometidos al análisis de los consejeros, que RTVE "no contó con, un período transitorio de adaptación del monopolio al mercado de libre competencia

Y al mismo tiempo que se abría el mercado a las cadenas privadas, RTVE transfirió a la empresa pública Retevisión, "sin contraprestación alguna", una parte sustancial de su propio patrimonio: las instalaciones de la red de difusión, que en su día se valoraron en 29.915 millones de pesetas.

"La pérdida no compensada de la red de difusión ha producido una fuerte descapitalización, una salida de recursos propios de tesorería y un encarecimiento de los gastos de difusión", se lee textualmente en el documento "Plan estratégico Grupo RTVE, 1995-1999".

Así que el popular Pirulí madrileño, al que muchos ciudadanos identifican aún como el símbolo de RTVE, le fue transferido a Retevisión en 1989 sin recibir una peseta por ello, siempre según la información que el actual director general, Jordi García Candau, ha entregado a los consejeros de RTVE. No cabe interpretarlo como una autocrítica de su propia gestión, porque eso se produjo en época de su antecesor, Luis Solana.

El endeudamiento ha provocado gastos financieros por valor de 52.000 millones de pesetas en los últimos tres años. Esos gastos eran prácticamente inapreciables en las sociedades del ente hasta 1991. La dirección de RTVE se expresa en términos dramáticos acerca de las consecuencias de este problema, para convencer a los consejeros de que apoyen el plan. A modo de ejemplo, en la propuesta se destaca que en 1993 los gastos financieros se situaron en torno al 30% de los ingresos por publicidad.

Según las cifras que recoge el propio plan sometido al Consejo de Administración de RTVE, entre enero y octubre del año pasado las televisiones privadas recaudaron 14.000 millones de pesetas más de publicidad que las cadenas de TVE. La televisión pública vió caer sus ingresos publicitarios de 155.788 millones de pesetas en 1989, último año de monopolio, a 70.000 millones en 1994.