El hijo de Paloma trajo el 'niñazo'

Paloma de Marco, de 34 años pronosticó que este año el primer premio de la lotería del Niño se vendería en la administración que regenta, la número 10 de Madrid, en la Puerta del Sol. "Estoy embarazada de mi primer hijo, así que tiene que caer aquí el niñazo", bromeaba. Acertó. Su despacho recibió un solo billete (10 décimos) del número 91.239. A repartir, 341 millones: 24 por cada fracción y un especial al décimo de 125 millones. Ayer el metro cuadrado donde los transeúntes entran a comprar la lotería de Paloma hirvió con cámaras y curiosos. Ni un agraciado se pasó por el kilómetro cero a brindar. "Nunca vienen aquí a cobrar, van a los bancos".Así que Paloma asume que jamás conocerá a los afortunados ni recibirá ningún regalo por haber vendido la suerte. "Cuando en 1989 repartimos los 2.000 millones del gordo de Navidad nadie dio las gracias", dice. La administración de lotería pertenece a su padre. "Él no va a aparecer por aquí", dice, "siempre me deja a mí estos follones". A ella y a las otras tres empleadas del local. "¡Juani, ven a las fotos!". Y Juani que no quería más retratos. " ¡Juani que hay que estar a las duras y a las maduras". Y a las duras y con cabreo paseaba una señora con su hija por la acera. "Mira que ya se lo decía yo a tu padre", mascullaba. "¿Qué le decías?"Pues que iba a tocar aquí, y no me hizo ni caso".