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KIO rastrea en Panamá las últimas pistas sobre el patrimonio exterior de Javier de la Rosa

Los investigadores contratados por el Grupo Torras-KIO para descubrir el refugio del supuesto patrimonio exterior de Javier de la Rosa han centrado sus pesquisas en una sociedad panameña denominada Alanis Financiera, según han asegurado' fuentes conocedoras de estos movimientos. Alanis fue propietaria de un inmueble en Londres en el que el financiero español se alojaba cuando visitaba la capital británica. Además, y en este caso en relación con la causa seguida en Barcelona contra el financiero por su gestión en Grand Tibidabo, se ha descubierto que la empresa Aciesa, que cobró comisiones de esta sociedad, es propiedad de una instrumental holandesa.

El juez Joaquín Aguirre también se ha interesado por las relaciones entre De la Rosa y la sociedad Tradeco, con sede en Nassau, capital del paraíso fiscal de las Islas Bahamas.El inmueble propiedad de la sociedad panameña Alanis se encuentra en el número 59 de Cadogan Lane, en el barrio londinense de Mayfair y fue utilizado como residencia por De la Rosa cuando acudía a las reuniones de KIO, que tiene su sede en Londres, en la época en que representaba los intereses del grupo árabe en España. No es la primera vez que De la Rosa se ve relacionado con el paraíso fiscal panameño: cuando la policía registró el domicilio particular del financiero encontró un pasaporte panameño a su nombre.

KIO denunció, en una querella presentada en la Audiencia Nacional, que Javier de la Rosa, a través de su sociedad Quail España, cobró más de 12.000 millones de pesetas durante su etapa como vicepresidente de Torras, propiedad del grupo árabe. Asimismo, en este caso a través de una demanda presentada en Londres, KIO reclama 500 millones de dólares a los antiguos gestores de Torras por considerar que desviaron ese dinero hacia sus cuentas privadas. Fuentes próximas a KIO consideran que el patrimonio de De la Rosa en el exterior supera los 30.000 millones de pesetas.

Conexión con Bahamas

Otra de las sociedades objeto de atención es Tradeco, cuyo domicilio social se encuentra en Nassau. La oficina operativa de Tradeco se encuentra en la calle de Plantamour, en Ginebra (Suiza), en el mismo domicilio que las oficinas de la sociedad Gesfinance, una gestora de fortunas creada en 1991 por antiguos ejecutivos del Bankers Trust. Uno de ellos, Yves Byrde, fue el gestor de algunas cuentas privadas en ese banco que recibieron entre 15.000 y 20.000 millones de pesetas del Grupo Torras durante 1990, 1991 y 1992 y que, según KIO, estaban controladas por De la Rosa. A tenor de las investigaciones, Gesfinance era un conducto a través del cual De la Rosa movia su patrimonio en el exterior.

Tradeco, por su parte, es formalmente propiedad de James R. Fees, de nacionalidad estadounidense, y con quien De la Rosa participó en algunas operaciones exteriores financiadas por Sierra Nevada Holding, filial al 100% de Grand Tibidabo, y que también tiene 'su sede en las Islas Bahamas. Precisamente, la concesión de dos créditos de 512 y 386 millones de pesetas de Sierra Nevada Holding a Javier de la Rosa es uno de los temas investigados en la instrucción judicial que sigue el juzgado de instrucción número 1 de Barcelona.

De la Rosa utilizó esos créditos para pagar intereses de una deuda particular que tenía con el Banco Santander. Al realizar el movimiento del dinero desde las cuentas de Sierra Nevada Holding a las de las cuentas del Santander cuyo titular era De la Rosa, el banco español transfirió en torno a 218 millones de pesetas de más, según los testimonios recogidos por el juez.

Poco después de formalizar la concesión de los créditos, los gestores de Sierra Nevada Holding y los directivos del Santander detectaron que el dinero transferido de más era en realidad propiedad de Tradeco, hacia donde fue enviado posteriormente. El interés reside en conocer de dónde recibió Tradeco ese dinero.

Finalmente, la otra vía de exploración es la sociedad holandesa Hertili BV, propietaria de Aciesa, sociedad que aparentemente cobró comisiones de 369 millones de pesetas por la venta del edificio donde se encontraba la sede de la antigua CNL (ahora Grand Tibidabo) a la Generalitat.

La documentación sobre Aciesa fue incautada por el juez Joaquín Aguirre durante el registro de unos despachos en Barcelona Aciesa facturó miles de millones de pesetas al Grupo Torras, de quien fue filial hasta mediados de 1990. Según las fuentes consultadas, las comisiones cobradas por Aciesa "podrían acercarse a las facturadas por la propia Quail". Esta sociedad, propiedad de De la Rosa cobró en comisiones 12.000 millones de pesetas al Grupo Torras. En su declaración ante el juez, Alberto Freixa, administrador único de Aciesa, afirmó que el abogado Juan José Folchi le comentó en una ocasión que una de estas comisiones, por importe de 300 millones de pesetas, fue a parar a Jordi Pujol Ferrusola, hijo del presidente de la Generalitat. Folchi negó que hubiera hecho este comentario a Freixa.

Banesto ejecuta Grand Tibidabo

M. P. Banesto ha decidido reclamar por vía judicial el crédito de 400 millones que concedió a Grand Tibidabo y que esta sociedad no devolvió cuando se produjo el primer vencimiento, el 1 de diciembre pasado. La ejecución de este préstamo, que tiene garantía hipotecaria, puede desencadenar un proceso de quiebra de la sociedad que presidió hasta mayo pasado el financiero Javier de la Rosa y. cuyo capital está esparcido entre 9.000 pequeños accionistas. Grand Tibidabo tiene desde hace varios días preparada la documentación para presentar la suspensión de pagos para el caso de que la situación de colapso financiero se tome insostenible.

Sin embargo, según fuentes Jurídicas, la suspensión de pagos no bloquearía la ejecución del crédito hipotecario de Banesto, que goza de preferencia, lo que podría obligar a los gestores de Grand Tibidado a instar su propia quiebra. Portavoces del banco no realizaron ningún comentario sobre estos hechos. El propietario de Banesto, el Banco Santander, tiene un paquete del 14% del capital de Grand Tibidabo, a consecuencia de la ejecución de un crédito impagado de De la Rosa.

Grand Tibidabo se encuentra en una situación financiera insostenible. La mayoría de sus propiedades inmobiliarias están hipotecadas en garantía de diferentes créditos bancarios, la mayoría de los cuales está vencido. Éste es el caso de la sede social de la sociedad, situada en la Avendida Diagonal de Barcelona, otorgada como garantía de un crédito del Banco Zaragozano que lleva varios meses vencido.

Recientemente, Grand Tibidabo también hipotecó diversas propiedades inmobiliarias en Dos Hermanas (Sevilla), en este caso para evitar que Hacienda dictara un embargo por diversos impuestos impagados, por un importe total cercano a los 300 millones de pesetas.

En contrapartida, la sociedad mantiene también abierta la vía judicial para reclamar una parte del dinero que le adeuda el propio Javier de la Rosa, en este caso 1.350 millones de pesetas.

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