Un piloto del helicóptero norteamericano murió tras caer en Corea del Norte

Uno de los dos pilotos del helicópetero norteamericano que fue obligado a descender el pasado sábado en Corea del Norte murió en el incidente, mientras el otro tripulante del aparato resultó ileso, según un comunicado de la Casa Blanca difundido ayer, que citaba informaciones procedentes de Pyongyang. El presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, declaró que la "trágica pérdida ha sido innecesaria".

El piloto fallecido fue identificado como el alférez David Hilemon. Su compañero superviviente es el alférez Bobby Hall. El comunicado de la Casa Blanca no precisa si el aparato, un helicóptero de observación OH-58C del Ejército de Tierra estadounidense, fue abatido o cayó accidentalmente cuando sobrevolaba la zona desmilitarizada que separa las dos Coreal."Lo que más nos preocupa ahora es conocer el estado en el que se encuentra el alférez Hall y garantizar su regreso, así como la repatriación del cadáver del alférez Hilemon", agregó el presidente Clinton en su comunicado de ayer.

Fuentes norteamericanas insisten en que no está claro si el aparato, que estaba desarmado y se desvió de su ruta, tuvo que hacer un aterrizaje de emergencia o fue derribado, aunque el Pentagono ha reconocido que se "encontraba claramente donde no debía". El Gobierno de Pyongyang afirmó ayer en una declaración que el helicóptero fue derribado tras violar su espacio aéreo.

El congresista Bill Richardson, amigo personal de Clinton, que se encontraba realizando una visita en Corea del Norte programada con antelación, recibió las primeras informaciones sobre el fallecimiento del piloto. Richardson había manifestado con anterioridad que si no se devolvía los pilotos a Estados Unidos "habrá graves consecuencias para las relaciones de EE UU con Corea del Norte", que ahora estaban en un periodo de deshielo.

El régimen norcoreano se comprometió ayer a facilitar al Comando de la ONU en Corea información sobre el incidente.