Los vecinos de una calle 'mortal' de Fuenlabrada logran una rotonda
La ruidosa protesta del barrio Arco Iris de Fuenlabrada (165.000 habitantes) tuvo efectos inmediatos. El Ayuntamiento de Fuenlabrada comenzó ayer los trabajos de instalación de una rotonda en la calle de Móstoles, después de que el jueves un millar de vecinos cortara el tráfico durante más de tres horas.
En la calle de Móstoles, de Fuenlabrada, tres peatones murieron arrollados por coches durante el último año. La última víctima mortal, Rosario Molin, de 27 años, falleció el pasado 1 de diciembre mientras cruzaba la calzada por un paso de peatones. Este último accidente movilizó a los vecinos.
Tras cortar la circulación en la calle de Móstoles durante más de tres horas, el concejal de Tráfico prometió a los, vecinos una rotonda. Algunos de los manifestantes incluso llegó a amenazar con extender las acciones de protesta durante la visita de los Reyes a Fuenlabrada el lunes.
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