El fiscal reduce a un año su petición de pena por el 'caso Pan Bendito'

J. A. HERNÁNDEZ El fiscal del caso Pan Bendito redujo ayer a un año de cárcel su petición de pena para el cabo de la Policía Municipal de Madrid José Manuel Villarejo. Antes de que comenzara el juicio en la Audiencia de Madrid, el fiscal le pedía'12 años de prisión. Pese a esta sustancial reducción, el acusador público considera que el cabo Villarejo cometió un homicidio al disparar contra el delincuente Juan. Andrés González, aunque en su acción, sostiene, concurrió la eximente incompleta de legítima defensa.

Entiende el fiscal que el cabo Villarejo disparó sobre Juan Andrés a una distancia de medio metro, al ver que éste había arrebatado el revólver a su compañero, Carlos Ibáñez, durante un forcejeo, y le apuntaba. Añade que, antes de disparar, el cabo Villarejo increpó a la víctima para que soltase el arma.

El hecho de que le pida un año de cárcel se debe a que, según el fiscal, Villarejo pudo haber utilizado otros medios antes de efectuar el mortal disparo. La nueva versión del fiscal sobre los hechos coincide básicamente con la expresada en el juicio por el procesado y los demás agentes municipales que intevinieron en la persecución y posterior detención de Juan Andrés. Todos ellos ofrecieron relatos coincidentes. Por el contrario, los testigos incurrieron en importantes contradicciones.

La quinta sesión del juicio, celebrada ayer, se centró en la exposición del nuevo informe del fiscal sobre lo ocurrido en un portal de Pan Bendito el 23 de agosto de 1991, cuando Villarejo disparó sobre Juan Andrés después de que éste robase un vehículo y una patrulla de la policía municipal le persiguiese.

25 millones para los hijos

Aunque deja en un año de cárcel los 12 que pedía inicialmente, el fiscal mantiene, en cambio, la cantidad de dinero con la que se debe indemnizar a los herederos de Juan Andrés González, quien a sus 33 años dejó una esposa y cinco hijos. A cada uno de los hijos, el agente Villarejo deberá pagar, a juicio del fiscal, cinco millones de pesetas; en total, 25 millones. Y si el policía resulta insolvente o no dispone de tal cantidad, deberá hacerlo por él el Ayuntamiento de Madrid, como responsable civil subsidiario.

El juicio se reanudará el próximo lunes, cuando podría quedar visto para sentencia. Ese día, el fiscal explicará las razones por las que mantiene los hechos como constitutivos de un homicidio. También expondrán su conclusiones definitivas el resto de las partes: el abogado de la acusación particular, Emilio Rodríguez Menéndez (quien pide 28 años de cárcel tras considerar los hechos como un asesinato; y reclama una indemnización 50 millones de pesetas para los herederos), el abogado de la defensa, Ángel López Montero, y el del Ayuntamiento. Ambos letrados reclaman la absolución de Villarejo por entender que el agente no tuvo otra opción que disparar, para defender su vida y la de su compañero.