El 60% de los alcaldes invierte menos de lo recomendado

La avalancha de obras, cuya inauguración coincidirá con la campaña electoral de mayo del próximo año, dejará en la región numerosos polideportivos, parques, centros de juventud, casas de cultura y polígonos industriales. Son los equipamientos previstos en la mayoría de los presupuestos, junto con la pavimentación de calles y la rehabilitación de cascos centrales y monumentos. La mayor parte de las obras se alimentará de las aportaciones regionales y municipales.Inversión es igual a inauguración. Y la suma de ambos conceptos da votos: máxima que conocen todos los alcaldes. Pero también saben que para hacer cosas nuevas hace falta mucho dinero. El director general de Cooperación, Antonio González, cree que "estar por debajo del 30% de inversiones sobre el total del presupuesto es malo. Veintiuno de los 35 municipios analizados (el 60%) -todos los que tienen más de 8.000 vecinos- está por debajo de ese listón. "Y para la capital [que dedica a inversiones un 23, 1 % del total] es poco", opina González.

El municipio que más dinero dedica a inversiones (un 67% del presupuesto) es San Lorenzo de El Escorial. El alcalde, Francisco Nicolás González, del PSOE, reconoce que esto ha provocado un aumento importante del déficit municipal "Ésa es nuestra carga, pero peor sería tener 30 kilómetros de calles sin asfaltar, carecer de Casa de Cultura o utilizar un alcantarillado del siglo XVIII. Prefiero invertir y deberlo, a no invertir y ver como el pueblo se hunde. Si no gastamos en San Lorenzo, el pueblo terminaría pagando la falta de servicios. Los ciudadanos lo comprenderán".

De los grandes municipios Alcorcón es el que más porcentaje de sus presupuestos (53,5%) dedica a inversión. Según su alcalde, el socialista Jesús Salvador Bedmar, "lo difícil es compensar dos políticas: que no haya una presión fiscal muy fuerte y que haya inversión. Es decir, una política de inversiones racional y de contención del gasto corriente". Alcorcón está construyendo un anillo verde, un polideportivo y rehabilitando Los Castillos -un edificio de principios de siglo-

Fuenlabrada, con un plan de inversiones que alcanza el 44,6% del presupuesto, está entre los cinco municipios que más gastan en obras. Fuenlabrada ha obtenido este año ingresos extras por valor de 5.000 millones merced al impuesto que pesa sobre las empresas que se asientan en sus polígonos y la adjudicación de un gran centro comercial a una empresa privada.

Pinto, cuarta localidad más inversora en proporción al volumen de su presupuesto, ahorró en los años buenos para poder gastar en los malos, aducen los técnicos regionales. "Han proyectado un parque de más de 100 hectáreas (el Juan Carlos 1) con el dinero que no se han gastado estos años. Me parece un poco exagerado para Pinto, pero ellos han decidido concentrar toda la inversión en este gran equipamiento", opina Antonio González.

En Móstoles, todo lo contrario. Las cuentas municipales son especialmente cicateras con la inversión, cuyo capítulo alcanza apenas el 4,2%. Según el alcalde, del PSOE, José Luis Gallego, "se debe a que todas las obras importantes de la legislatura se presupuestaron en 1993". Algunas de estas obras, como la construcción de un conservatorio y una biblioteca central, además de la rehabilitación de la finca Liana, futuro pulmón de Móstoles, están ya a punto de concluir: "En el presupuesto para 1994 hemos incluido sólo partidas pequeñas Dara obras menores", manifestó el alcalde.

Parla ocupa la siguiente plaza en la relación de municipios con menor inversión este año. El gobierno local socialista espera compensar la penuria Inversora con las ayudas que Parla recibe, por primera vez, de la CE mediante los fondos FEDER.

Termina un ciclo

El PSOE, que gobierna en la región desde 1983, considera que ha concluido un ciclo: "Los municipios del sur, pese a tener menos ingresos, gozan ya de los mismos equipamientos que las localidades ricas del norte", dice Virgilio Cano, consejero de Cooperación y responsable de los proyectos de obras aprobados por el Ejecutivo regional para equipar a los pueblos.

Ahora arranca otro ciclo distinto. "El problema que ahora tienen algunos municipios es la falta de dinero para mantener los equipamientos ya construidos. En la ley de Administración Local que pensamos aprobar se incluye un fondo de cooperación por el que la Comunidad trasladará dinero a los ayuntamientos para gastos corrientes. Hasta ahora sólo pagábamos obras nuevas", anuncia Cano.

Su compañero de partido José Quintana, alcalde de Fuenlabrada y presidente de la Federación Madrileña de Municipios (FMM), comparte esta idea: "Los alcaldes hemos reivindicado un fondo de cooperación que distribuya el 60% de los recursos para inversiones y el resto para gastos corrientes".