La misión Euromir se modifica por problemas eléctricos en la estación

Un problema en el suministro de energía en la estación espacial rusa Mir, que se produjo el pasado día 11, ha obligado a modificar el programa de experimentos que lleva a cabo la misión Euromir 94, el primer vuelo tripulado conjunto que efectúan los rusos con un astronauta de la Agencia Europea de] Espacio (ESA).

Desde esa fecha, cinco días después de la llegada a la estación del astronauta alemán Ulf Merbold, junto a los rusos Alexandr Viktorenko y Elena Kondákova, ha dejado de funcionar, para evitar nuevos problemas, el horno con el que se debían efectuar varios experimentos de cristalografía. Estas pruebas no han sido suprimidas sino pospuestas a los últimos días de la misión. El 3 de noviembre, Merbold volverá a la Tierra acompañado de Talgat Mussabáyev y Yuri Malenchenko, que habrán permanecido medio año en órbita. En la Mir seguirá, junto a Viktorenko y Kondákova, el médico Valery Poliákov, destinado a ser el primer hombre que permanezca año y medio ininterrumpido en el espacio.El problema eléctrico se produjo, según la versión oficial rusa, como consecuencia del masivo uso de energía de los diversos "sistemas de a bordo. Recientemente, fueron cambiados los paneles solares de la Mir para aportar más energía.

El bajón en el abastecimiento eléctrico ha causado también problemas en las muestras de sangre, orina y saliva que permanecían en un congelador, donde se guardan para ser posteriormente analizadas en tierra. Estas muestras forman parte del área principal de experimentos de la misión.

El propio Merbold explicó ayer a un grupo de periodistas que acudieron al centro espacial de Toulouse (Francia), con el que la Mir estableció una comunicación directa de 20 minutos, la importancia que tiene estudiar las consecuencias de la ingravidez sobre los sistemas cardiovascular, neurosensorial y muscular del hombre, para preparar misiones de más larga duración así como para conocerlos mejor y utilizar los datos obtenidos con fines médicos. Poliákov aseguró que los seis tripulantes de la Mir, incluido él mismo, se encontraban bien de salud, aunque Merbold dijo tener dificultades para dormir.

Euromir-94 durará casi un mes y es la misión más larga desarrollada hasta el momento con participación de un astronauta europeo. El español Pedro buque se preparó también para este vuelo como sustituto de Merbold.