El PSOE aragonés se rebela ante el intento de excluir al alcalde de Zaragoza en las locales

La dirección regional de los socialistas en Aragón no acatará las instrucciones de la Ejecutiva Federal con vistas a las listas para los próximos comicios locales y autonómicos si se margina a Antonio González Triviño, actual alcalde de Zaragoza, según fuentes de la ejecutiva, aragonesa. El deterioro de la imagen de González Triviño (asumido por sus propios compañeros aragoneses) preocupa mucho en la sede central del PSOE, ya que Zaragoza -tras Barcelona- es la segunda ciudad de España en importancia en la que el PSOE controla la alcaldía.Los sucesivos problemas planteados tanto por el alcalde como por el presidente regional, José Marco, han llevado a la dirección federal socialista a descartar la presencia de ambos al frente de las listas para las municipales y autonómicas de la próxima primavera.

Ahora el principal problema de la dirección es, según un destacado dirigente socialista, encontrar en un feudo guerrista como es Aragón a los candidatos oportunos. Las mismas fuentes señalaron que la ausencia de interlocutores "solventes" dificulta la renovación en las filas del PSOE aragonés.

Fuentes de la dirección regional socialista aseguraron a EL PMS que "Antonio [González Triviño] va a continuar siendo nuestro candidato a la alcaldía, diga lo que diga Madrid. Aquí no va a ocurrir como en otros sitios [en referencia a los recientes congresos del PSOE en Andalucía], ya que las listas las hacemos nosotros, les guste a no". Por lo que respecta a José Marco, él mismo ha expresado en diversas ocasiones sus dudas sobre la oportunidad dé repetir candidatura a la presidencia regional.

González Triviño vive actualmente una etapa crítica en el seno del Grupo Socialista, del que es miembro a causa de su condición de eurodiputado. González Triviño se ha negado repetidamente a acatar la disciplina interna del partido en algunas cuestiones administrativas de la representación del PSOE en el Parlamento europeo.

La cúpula del PSOE se mostró molesta por el discurso de Marco en el reciente debate de las autonomías en el Senado. La intervencion de Marcó fue calificada de "extremadamente reivindicativa".