'Metrópolis' dedica un especial a seis ilustradoras
El espacio de La 2 Metrópolis tiene esta noche Un toque feminista. Así ha titulado la mirada que dedica a los dibujos. animados firmados por mujeres. Son seis cortometrajes con la crítica y el humor como denominador común: Una noche de marcha, de Joanna Quinn; La primera noche, de Cindy Irving; El extraño paquete, de Alison Snowden, y Una cosita, Un corte radical y Cuestión de peso, de Candy Guard.
Otro punto en común es la procedencia británica de las autoras. Precisamente la realización de dibujos animados cuenta con el decidido apoyo de las cadenas de televisión -sobre todo BBC y Channel 4-, que coproducen y emiten la mayoría de los trabajos.
"Este apoyo te permite asumir riesgos", afirma Joanna Quinn, cuyo cortometraje Una noche de marcha (Girls night out) fue un éxito internacional. También lo ha sido su trabajo más reciente, Britannia, premiado en seis festivales (incluido el de Valladolid, en 1993) y finalista del Cartoon de Oro 1994.Alison Snowden también llegó a la final del máximo premio europeo de la animación (Cartoon D'Or), con Bobs birthday y con la obra que Metrópolis emite hoy, El extraño paquete (Second class mail) -su proyecto de fin de carrera en 1984- estuvo a punto de obtener un Oscar al mejor corto de animación.
El público al que van dirigidas las historias de estas jóvenes animadoras -en torno a los treinta años- es decididamente femenino, pero también "joven adulto". "Pasamos de las historietas infantiles a los comics para mayores y no hay nada interesante para los adolescentes o los veinteañeros", afirma la cáustica dibujante Candy Guard.
Historias reales
"Está claro que las historias reales de mujeres contadas por mujeres funcionan muy bien. Ahí tenemos a Roseanne ", dice Guard. Para Joanna Quinn, "hay que mantener un estilo personal, demostrar que tu trabajo no lo puede hacer cualquiera".Lo que estas realizadoras hacen es abordar la vida real de las mujeres, pero sin lamentos de víctimas. Denuncian discriminacíones, reivindican puntos de vista, pero siempre con ironía y sarcasmo. Animan con ternura historias que podrían ser duras. En sus cortometrajes hay, por supuesto, hombres que hacen el ridículo, pero también mujeres atacadas por su propia estupidez.
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