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Stoichkov y Romario, víctimas de una estafa en la compra de turismos

El futbolista del Barcelona Romario da Souza adquirió un Mercedes por valor de 19 millones de pesetas y llegó a tener el vehículo, pero no la documentación. El ciudadano de Barcelona Jorge Ferrer Miras entregó 2.340.000 pesetas para la compra de un Mazda modelo 323. No llegó a ver este coche y perdió el que tenía. Los dos compraron los vehículos a Ahmed Jaffa Sacalaway, responsable de la firma Motor Jaffa y también de Barnatrade -ex importadora oficial de los vehículos Mazda-. Estos casos forman parte de un número superior a 20 personas que han resultado estafadas. Stoichkov también se ha visto vinculado.

Jaffa, nacido en 1960 en Freetown (Sierra Leona) pero con nacionalidad española, como los goles de Romario, ha desaparecido como una exhalación. Ni las víctimas directas, ni Caixabank -que reclama 80 millones-, ni la propia policía tienen noticias de su paradero. Los perjudicados que por ahora han denunciado la presunta estafa, incluida la entidad financiera, coinciden en un dato: la última vez que tuvieron noticias o vieron personalmente a Ahmed Jaffa fue en septiembre.La entidad Caixabank ha denunciado esta semana a Jaffa ante la policía por lo ocurrido con una línea de crédito que concedió a la concesionaria de coches Motor Jaffa. El montante del crédito era de 100 millones de pesetas y consistía en una forma de financiación para la concesionaria que tramitaba la importación de los vehículos que le compraban. Caixabank entregaba la documentación de los vehículos adquiridos cuando la concesionaria le abonaba la cantidad que el comprador había pagado.

Según la entidad, Motor Jaffa sólo afrontó 20 millones de la línea de crédito y el resto quedó colgado. Es decir, la concesionaria sí recibía el dinero de los compradores, pero no lo entregaba a Caixabank, que tiene una reserva de dominio sobre los vehículos. La policía ha hallado, de momento, 7 coches y cree que 12 Fiat y 2 Mercedes han podido salir del país de forma irregular. Ese camino lleva a el Mercedes que compró el delantero brasileño Romario. El futbolista, pese a no tener la documentación del coche, intentó embarcarlo para que llegara a su país. Era un regalo para su padre.

Una larga odisea

Peor suerte tuvieron otros, para quienes la odisea empezó hace meses. Este es el caso de Jorge Ferrer Miras, que el 21 de marzo entregó a Barnatrade su coche, un Citroën AX -valorado en 300.000 pesetas más dos talones por un total de 2.030.000 pesetas. Todo ello para adquirir un Mazda 323 GLX. Pasó el tiempo previsto de entrega -25 días- y Barnatrade le informó de que había "problemas con los papeles de la importación", según relata en la denuncia. En julio, le comunicaron que había llegado el coche. Sin embargo, no se lo entregaron. Con las vacaciones a la vuelta de la esquina le cedieron un coche en alquiler, operación en la que intervino Fiat Nova Central, de El Prat del Llobregat. El comprador, al ver la tardanza, solicitó la devolución del dinero para adquirir otro vehículo. Se encontró con una propuesta: la compra de otro vehículo, un Lancia Delta, a Fiat Nova Central, de la que hasta hace seis meses era accionista el jugador de baloncesto del Barça, Juan Antonio San Epifanio, Epi, que vendió su participación.

La paciencia del comprador -que está pagando un crédito mensual por el coche que nunca ha tenido- llegó al límite cuando se dio cuenta de que esta operación no existía. A primeros de este mes, optó por acudir a la Guardia Civil y denunciar lo ocurrido.

Hasta otro jugador azulgrana -el delantero búlgaro Hristo Stoichkov- se ha visto involucrado en el caso. Supuestamente, Jaffa falsificó una factura antigua de un coche adquirido por la mujer del búlgaro. Hristo Stoichkov y Jaffa tienen una relación empresarial de tipo deportivo.

La bola de nieve ha crecido tanto que el director de ventas de la firma Fiat en España ha tomado la decisión de reponer los coches a todos aquellos perjudicados que habían adquirido los vehículos que fabrica la multinacional italiana.

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