El Real Madrid y el Athletic se ofrecen ahora la paz

Tan sólo un mes después de la lesión de Redondo, el Madrid y el Athletic se reencuentran el sábado en el Bernabéu. Los protagonistas de ambos bandos, que entonces se cruzaron duras acusaciones y desataron una polémica feroz, se ofrecen ahora la paz. Y todo, por el temor a que el clima de crispación con el que Bilbao recibió al Madrid en la cita veraniega se convierta el sábado en un recibimiento demasiado hostil hacia el Athletic.Ángel Cappa, el segundo entrenador del Madrid y protagonista en la polémica del verano, es uno de los primeros en izar la bandera de la paz. "Lo de Redondo", dice, "quedó olvidado. Espero que al Athletic se le reciba con toda normalidad y respeto. Como dije entonces, vamos a retirar de los campos todo lo que no sea deportivo. Hay que evitar otro motivo de crispación. Tenemos que dar ejemplo".

Del comportamiento de los jugadores, según un directivo del Madrid que prefirió mantenerse en el anonimato, depende la tranquilidad del partido: "Deben ayudar más que nunca. Que no hagan entradas duras, que no exageren las caídas, que no hagan gestos para provocar...

Javier Irureta, el entrenador del Athletic, cree que "va a ser difícil que la gente olvide" lo de la pretemporada. "Lo malo de entonces", dice, "no fue la jugada en sí [la entrada de Mendiguren que lesionó a Redondo], sino las desafortunadas declaraciones de todos". Una de las grandes preocupaciones del técnico, que confiesa que debe sopesar alinear o no a Mendiguren, es que cualquier entrada puede ser tachada de violenta. "Es el riesgo para los dos equipos, Y por eso, tendremos que tener mucho cuidado. Convendría esforzarse más que nunca en conseguir un partido limpio, pero tampoco el jugador puede cohibirse".

Juan Carlos Lachaga, el jefe de prensa del Athletic, contó el sentir de su club: "Nos gustaría que fuera un partido más, pero estamos resignados a que la gente recuerde lo de la pretemporada". Hoy se decidirá si el encuentro es declarado de alto riesgo.

Expedientes

La Comisión Nacional Antiviolencia acordó ayer proponer a la Delegación del Gobierno en Madrid que imponga una multa de cinco millones de pesetas -la máxima posible en las infracciones graves- al Real Madrid. La propuesta se debe a que el club madridista no respetó las normas de seguridad en el partido de Copa de la UEFA que su equipo disputó el pasado 13 contra el Sporting de Lisboa en el Santiago Bernabéu al no ubicar con la distancia requerida a las aficiones de ambos conjuntos.

El Comité de Competición de la Federación, por otro lado, abrió expediente al presidente del Madrid, Ramón Mendoza, por "declaraciones que pueden afectar al buen orden deportivo", y a su entrenador, Jorge Valdano, a Pedro De Felipe, secretario técnico del Español, y a Manuel Ruiz de Lopera, apoderado general del Betis, por sus críticas a los árbitros.