PP e Izquierda Unida desean que cualquier diputado, y no sólo los portavoces, pueda interpelar a González

El Grupo Popular no cree necesario "ningún tipo de formato especial" que regule las comparecencias del presidente del Gobierno ante el pleno del Congreso para responder preguntas en las sesiones de control de los miércoles. Tampoco admite cortapisas en cuanto a los diputados que puedan formularle preguntas al jefe del Ejecutivo y en ello coinciden con Izquierda Unida. El Grupo Socialista confirmó ayer, por medio de su portavoz, Joaquín Almunia, que González iniciará en breve sus comparecencias para someterse al control parlamentario directo y adelantó que propondrán algún tipo de normas que regulen estas comparecencias.Almunia, sin concretar excesivamente, afirmó que su grupo desea fijar un tiempo máximo para que el presidente conteste en el pleno y que sean "los portavoces de los grupos entendido en sentido amplio" los que puedan formular estas preguntas. Para Almunia, los diputados que podrían hacerlo serían aquellos que tienen acceso a la Junta de Portavoces, es decir, miembros de la dirección de los grupos parlamentarios.

Aunque fuentes de La Moncloa aseguraron el lunes que el ministro de la Presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba, plantearía ayer ante la Junta de Portavoces la necesidad de un acuerdo sobre las comparecencias de González, lo cierto es que el ministro se limitó a mantener conversaciones privadas con los portavoces parlamentarios para anunciarles el envío de un texto con carácter de normas internas sobre las comparecencias de González.

Falta de voluntad política

Loyola de Palacio, portavoz adjunta del PP, aseguró que no es necesario plantearse ningún tipo de especialidad para que el presidente responda a los diputados. La presencia del jefe del Ejecutivo para responder a los parlamentarios es algo "de lo que se viene hablando desde hace mucho tiempo y lo único que hace falta es la voluntad política para que, de una vez, esa presencia de Felipe González se haga realidad", dijo.

Según De Palacio, no es necesaria ninguna modificación reglamentaria ni ninguna precisión específica porque la Constitución y el reglamento de la Cámara ya establecen las normas de comparecencia para los miembros del Gobierno.

Además, según la diputada popular, entre 1982 y 1986 González contestó interpelaciones y preguntas aunque después "ha eludido sistemáticamente las peticiones de comparecencia que se le han formulado". Para De Palacio, la presencia de González respondiendo preguntas "e interpelaciones" sólo supondría "volver a la normalidad parlamentaria".

Rosa Aguilar, portavoz del grupo parlamentario de Izquierda Unida-Iniciativa per Catalunya (IU-IC), admitió que debe acordarse la duración de la comparecencia del presidente en las sesiones de control pero, en cambio, fue tajante al asegurar que su grupo no admitirá ningún tipo de restricciones para que cualquier diputado pueda formular preguntas orales en el pleno al presidente.

Para Aguilar, "cualquier parlamentario y cualquier grupo" tienen que tener garantizado el derecho a formular preguntas al presidente. "Sin eso, estaríamos ante una campaña propagandística y no ante una manifestación parlamentaria que debe tener carácter habitual".

La portavoz de IU-IC dio seguridades de que su grupo no desea desvirtuar la presencia de González en las sesiones de control "ni convertir el Parlamento en un circo romano", pero le parece inadmisible que sólo los portavoces o portavoces adjuntos de los grupos tengan capacidad para preguntar al presidente del Gobierno.

343 diputados al margen

Según Rosa Aguilar, eso sería "cercenar el derecho del pleno de los diputados y dejar fuera de juego a 343 de sus miembros". Josep Sanchez Llibre, portavoz adjunto de CiU se mostró abiertamente favorable a las comparecencias de González y advirtió del riesgo de que puedan frustrarse estas comparecencias de control "si se ponen demasiadas trabas".

[Por su parte, Roc Fuentes, portavoz socialista en el Parlamento catalán, anunció que su grupo presentará una proposición no de ley para que Jordi Pujol comparezca mensualmente ante la Cámara autonómica].