Los sindicatos piden al Ejecutivo que pase a los hechos
Los sindicatos quieren que el Gobierno pase de las palabras a los hechos. Les parece bien que Felipe González apueste por reanudar el diálogo social en septiembre, pero les parece mejor que las negociaciones que están ya en marcha culminen en acuerdo. La primera prueba de la voluntad negociadora del Gobierno va a estar, según los sindicatos, en la discusión sobre la subida de sueldo de los funcionarios para 1995.El Gobierno cuenta así con una predisposición favorable de la UGT y de Comisiones Obreras que, según sus dirigentes, quieren aprovechar la recuperación de la economía para frenar la destrucción de empleo.
La modificación general de las condiciones de trabajo, la sustitución de contratos fijos por temporales, el cambio de ocupación y de residencia de las personas con empleo van a transformar el mercado de trabajo de forma insoslayable, según el Gobierno. Por tanto, es inútil enfrentarse a cambios inevitables, según miembros del Gabinete.
El secretario general de UGT, Cándido Méndez, consideró ayer especialmente positivo que el Gobierno plantee el diálogo sobre cuestiones concretas, en línea con una tesis defendida hace un año, según él, por los dos sindicatos mayoritarios. Tanto el secretario de relaciones internacionales de UGT, Manuel Bonmatí, como el portavoz de CC OO, Ángel Campos, matizaron que la propuesta del Gobierno no tiene nada de novedosa entre otras cosas porque durante el pasado julio mantuvieron varias conversaciones con altos cargos de Trabajo. En esas conversaciones quedó muy perfilado un acuerdo sobre el proyecto de ley de Seguridad en el trabajo. Por tanto, de lo que se trata ahora, según la UGT, es de qué el Gobierno culmine el acuerdo.
Para Comisiones, el Ejecutivo debe demostrar su voluntad de pacto en la negociación para la subida de sueldo de los funcionarios, donde considera factible un acuerdo. Para los ugetistas, el pacto pasa por que la Administración garantice a los empleados públicos el mantenimiento del poder adquisitivo, con una subida similar a la prevista para el índice de Precios al Consumo (IPC). Los dirigentes de CC OO piden además que se mantenga la cláusula de revisión.
