La Comunidad impide por vez primera un gran proyecto urbano del alcalde
No hubo acuerdo de última hora. La Comisión Regional de Urbanismo, el organismo con mayores competencias sobre el desarrollo del territorio en la Comunidad de Madrid, denegó ayer la petición del Ayuntamiento de aprobar la recalificación de 22 millones de metros cuadrados (2.200 hectáreas) en seis zonas de la ciudad para construir 72.000 viviendas, barrios de similar entidad a Alicante o Santander.Es el acuerdo urbanístico adoptado por la Comunidad de más trascendencia sobre una modificación del vigente Plan General de Ordenación Urbana, impulsado en 1985 por el entonces consejero Eduardo Mangada. El Ayuntamiento de Madrid pidió esta recalificación hace un año. Hace dos meses, ante el bloqueo de las conversaciones entre sus segundos, el alcalde, José María Álvarez del Manzano, y el presidente de la Comunidad, Joaquín Leguina, aparcaron tras una comida este asunto -por su importancia- de un paquete de problemas entre ambas instituciones.
El plazo para abordar esta pretensión municipal terminó ayer. La comisión regional (formada por representantes de la Comunidad, la Federación de Municipios, empresas públicas, otros ayuntamientos y ecologistas) la rechazó con 22 votos en contra y sólo cuatro a favor (todos de municipios gobernados por el PP). El problema no está sólo en el tamaño de la operación que plantea el Ayuntamiento. La Comunidad quiere rebajar el volumen de las viviendas a la mitad (36.000) y que muchas sean sociales (casi el 500/6), pero también que se integren en un modelo de ciudad que contemple, además de viviendas, calles, carreteras, colegios... O sea, que el Ayuntamiento renuncie ahora a todo ese bloque de viviendas y desarrolle sólo la mitad y que reconsidere el resto en unos meses cuando presenten su nuevo Plan General en redacción. Desde la Comunidad se insinúan pretensiones económicas por parte del Ayuntamiento en estos planes. Los urbanistas autonómicos acusan a sus colegas municipales de calcular un precio de urbanización de esos suelos muy alto que, sumado a las posteriores adjudicaciones a la baja (sobre el 15%), provocará grandes ingresos en las arcas municipales.
PASA A LA PÁGINA 3
El PSOE acusa al PP de usar el suelo como en el franquismo
VIENE DE LA PÁGINA 1El concejal madrileño de Urbanismo, José Ignacio Echeverría, opina que la Comunidad se inmiscuye en competencias ajenas. Echeverría rechaza intereses especulativos en sus planes de vivienda -dice que el precio de la urbanización del suelo lo han fijado prestigiosos ingenieros- y replica que es necesaria toda la operación para integrarla no sólo en la demanda actual de pisos sino en las futuras necesidades de otro tipo de infraestructuras y dotaciones. La Comunidad argumenta que esa repercusión metropolitana habrá que negociarla con otras administraciones.
El Ayuntamiento, ante la negativa de la Comisión Regional de Urbanismo, recurrirá esta decisión en los tribunales por la vía contencioso administrativa y ante la sociedad por la vía política. "Explicaremos a los ciudadanos de quien es la culpa de que no podamos cumplir la promesa electoral de nuestro programa de poner en el mercado suelo urbanizable para 70.000 viviendas y de que los madrileños se tengan que ir a vivir a la periferia, donde la Comunidad sí recalifica terrenos" anuncia Echeverría.
José María Rodríguez Colorado, el consejero de Política Territorial, conversó varias veces con Echeverría antes de la comisión. "Me siento frustrado, hemos avanzado mucho en los últimos meses para llegar a un acuerdo y al final el Ayuntamiento lo ha roto por una cuestión de competencias", concluyó. El consejero aseguró estar dispuesto a tramitar con urgencia una contraoferta de hasta 40.000 viviendas entre cinco de los seis barrios que quiere el Ayuntamiento.
La Comunidad acepta a la baja todos los planes municipales menos el de Arroyo del Fresno, junto al Pardo. Rechaza cambiar de golpe el uso de 2.200 hectáreas simplemente con una modificación puntual del Plan General -sin esperar a lo que diga el nuevo plan- porque sería "dar carta blanca al Ayuntamiento".
El concejal del PSOE José María de la Riva calificó este plan de "especulativo" y señaló: "Conseguirán privatizar la urbanización del futuro de la ciudad concentrando todo el suelo disponible en seis o siete grandes operadores. El PP ha rescatado el modelo urbanístico del desarrollismo de los años sesenta.". El PSOE mantiene que en la ciudad queda suelo para 90.000 viviendas del anterior plan.
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