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CAMINERO.

El valor español más sólido. Clemente se guardó su carta frente a Corea y le dejó a la sombra. Salió en el segundo tiempo y aupó el partido; explotó ante Alemania y goleó a Bolivia. Rompió la baraja del seleccionador. Ahora pintan bastos: no cotizará frente a Suiza. ¡Por patoso!

ABELARDO.

Josep Lluis Núñez apostó antes de que se abriera la bolsa mundialista y acertó. Su brooker, Johan Cruyff, le recomendó a Abelardo. Hoy, su precio actual se hubiera triplicado,

BOLIVIA

La voluntad de un puñado de jugadores cargados de ilusión ha permitido a Bolivia cosechar los mejores resultados de su historia: ha conseguido su primer punto mundialista en tres ediciones -participó en 1930 y 1950- y el primer gol. Éste gracias a la filantropía española, una virtud muy valorada en otros países. En Angola saben de qué va (Barcelona 92, baloncesto).

COREA DEL SUR

Su tercera participación consecutiva en un Mundial se ha cerrado como las anteriores. A casa tras la primera fase. Un susto a España, otro a Alemania, y hasta la próxima.

RONALDO.

Carlos Alberto Parreira, seleccionador brasileño y futuro entrenador del Valencia, ha decidido no invertir, por ahora, con Ronaldo, el nuevo Pelé, según la torcida. La obstinación de Parreira es invencible. Ni su madre lo ha conseguido. Radio Globo juntó en directo a Mamá Perreira con Carlos Alberto. Mamá: "H¡jo, por favor, saca a Ronaldo ante Suecia". Hijo: "Ya sabes que por tí hago lo que sea, pero eso es demasiado".

CLEMENTE

La táctica onírica impuesta por el seleccionador español ante Bolivia resultó un desastre. El técnico, que atribuyó el planteamiento a un sueño, consiguió que los buenos pareciesen malos y los malos pareciesen peores.

ALEMANIA.

Una pírrica victoria sobre Bolivia, un inmerecido empate con España y un agónico triunfo sobre Corea del Sur, corrobora la cicatería futbolística del actual campeón del mundo. Un guión habitual que huele a podrido.

RUSIA

Los rusos se amotinaron en invierno. Les concentraron en un motel donde dormían con pieles. Ahora se han liado la manta a la cabeza y ayer salvaron todo el honor.

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