El alcalde cede a las presiones y suaviza su bando de carga y descarga
Las movilizaciones de transportistas contra el bando del alcalde sobre carga y descarga surtieron efecto: el Ayuntamiento cedió. Y los transportistas desconvocaron sus paros y concentraciones en la ciudad. En la práctica, el bando, que el alcalde consideraba innegociable, se aplicará de forma flexible y será perfilado nuevamente teniendo en cuenta a aquellos sectores del transporte -asociaciones de ligeros y contenedores- cuyas opiniones no fueron consultadas. Las restricciones sobre la actividad de contenedores, basculantes y volquetes, así como los horarios de los vertederos, serán revisadas.Todos ganan y todos ceden. Tal era el principal resultado de la reunión que dos concejales, Carlos López Collado, de Seguridad, que llevó la voz cantante, y José Antonio García Alarilla, de Circulación, mantuvieron a media tarde de ayer con nueve representantes de transportistas.
Rigidez innecesaria
"El verano convierte en innecesaria la aplicación rígida del bando y nos da margen para solucionar los problemas legítimos de estos sectores del transporte, que la CEOE y la CEIM (favorables a la nueva norma) no habían expuesto con detalle", dijo López Collado.
Previamente, varios centenares de transportistas participaron en una asamblea de subido tono, donde había aflorado la indignación contra el bando. Los representantes del sector de transportes de contenedores de materiales de construcción, así como los de vehículos ligeros, informaron que la aplicación de la nueva norma implicaba en la práctica la paralización del sector auxiliar de la construcción, por el desajuste de los horarios: el bando sólo les permite cargar y descargar hasta las nueve de la mañana, con lo cual el horario hábil para faenar se ceñiría a una hora diurna. Por la noche, dijeron, nadie trabaja en las obras.
De igual modo, los transportistas destacaron que la aplicación rígida del bando convertiría en inviable la actividad con los contenedores, ya que los cuatro vertederos madrileños de escombros cierran sus puertas a las siete de la tarde.
En la reunión conjunta de la tarde que desbloqueó el conflicto, el Ayuntamiento consideró como interlocutores válidos a los transportistas del sector de ligeros y de acarreo de materiales de construcción, que habían quedado fuera de las conversaciones previas a la redacción del bando. Se negociará sobre los 47 puntos de contratación donde los vehículos ligeros pactan con los particulares los portes intraurbanos. López Collado garantizó una aplicación flexible -sin apenas sanciones- de dos de los artículos del bando, el 100 y el 11 0, referidos a contenedores y a las excepciones fijadas para las mudanzas y el traslado de combustible; la semana entrante se celebrarán nuevas reuniones.
Respecto a los hechos ocurridos por la mañana junto a la plaza del Conde de Casal, donde un agente municipal sufrió la fractura de un brazo al instar al conductor de un camión a seguir una ruta, el edil expresó su deseo de que "los hechos permitan demostrar al juez que se trató de un volantazo accidental, no de una agresión". El conductor del camión, de la empresa Selvec, Ildefonso Posilio, que sufrió lesiones en un brazo y magulladuras en el cuello, permanecía anoche a disposición judicial.
López Collado subrayó que el bando sigue en vigor, pero matizó que la disminución de la circulación durante el verano permitirá al Ayuntamiento modificar hábitos comerciales anteriores, que restringían durante la noche la carga y descarga. "Todo para mejorar el tráfico rodado por la ciudad", dijo.
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