El Rey elogia la adaptación de la Legión a los nuevos tiempos

El Rey elogió ayer la adaptación a los nuevos tiempos que ha experimentado en los últimos años la Legión, cuerpo que eligió en esta ocasión para una de sus visitas semestrales a unidades del Ejército. Tras presenciar distintos ejercicios en Ronda (Málaga), don Juan Carlos dejó escrito en el libro de honor del Tercio Alejandro Farnesio: "Estoy orgulloso de vosotros. Hoy he comprobado que habéis sabido fundir precisión y futuro". Más que las maniobras concretas, el monarca reconocía así el trabajo de los legionarios en Bosnia.

Es la primera vez que don Juan Carlos visita un acuartelamiento de tropas que han prestado servicio en la ex Yugoslavia. El grueso de la Agrupación Málaga, primer destacamento que el Gobierno envió a los Balcanes, estaba formado por miembros del Tercio Alejandro Farnesio, con sede en Ronda, mandado por el coronel Francisco Javier Zorzo. En sus palabras de bienvenida al Rey, Zorzo también se refirió al nuevo papel desempeñado por la Legión: "Este Tercio, al solicitar y conseguir ser la primera unidad del Ejército español en desplegarse en Bosnia-Hezegovina para cumplir la nueva misión de ayuda humanitaria, ha sido fiel a la permanente vocación de servicio de la Legión y ha demostrado que sabe adaptarse a los cambios que exigen los tiempos en que vivimos".Antes de regresar a Madrid, don Juan Carlos descubrió un monolito en el patio de banderas del campamento que conmemora la participación de la Legión en las misiones de paz de la ONU, simbolizada por un mapa del mundo sobre el que se extiende el escudo del cuerpo fundado por Millán Astray en 1920.

Ejercicios con fuego real

Dos soldados del Tercio Alejandro Farnesio perdieron su vida en Bosnia, uno al dispararse - su propia arma y otro por la explosión de una granada.Durante más de tres horas, el Rey, que llegó pilotando su helicóptero, recorrió distintos puntos de la serranía de Ronda, donde presenció varios ejercicios militares. En el campo de tiro de Las Navetas, se realizó un pasillo de fuego y un golpe de mano realizados con fuego real -un disparo de mortero en esta última operación causó un pequeño incendio en un encinar-. Desde Las Navetas, el monarca se trasladó hasta la Cueva del Gato, donde presenció una exhibición de rapel, tirolina y escalada a cargo de la unidad de montaña de la Bandera de Operaciones Especiales.

La jornada se cerró en el cuartel de Montejaque con una parada militar y un homenaje a los muertos de la Legión.