Sotos niega ante el juez Moreiras que su gestión en PSV fuera irregular

Carlos Sotos inauguró ayer la ronda de declaraciones sobre el escándalo PSV, que afecta a 20.000 familias, ante el juez de delitos monetarios, Miguel Moreiras. El antiguo gerente de la cooperativa de viviendas negó cualquier tipo de irregularidad en su gestión y dijo no saber dónde está el dinero de los cooperativistas, según fuentes jurídicas de la acusación. Hoy seguirá declarando. Mientras, varias decenas de afectados por la crisis protestaban ante la Audiencia Nacional. La práctica totalidad de la anterior ejecutiva de UGT, incluido Nicolás Redondo, debe pasar por el despacho de Moreiras.

La declaración de Sotos ante Moreiras respondió a la expectación despertada tanto dentro de la Audiencia como fuera. Dentro, por su duración. Fuera, por las protestas de los cooperativistas. El ex gerente de PSV comenzó a declarar a las 10.40 horas y acabó, en lo que fue la primera entrega, a las 13.00, momento en el que se produjo un receso de media hora. Luego, el interrogatorio se volvió a interrumpir a las 14.30 para almorzar. Dos horas y media después se reinició la declaración, que concluyó a las 20.05. Sotos salió de la Audiencia a toda velocidad en un vehículo negro.El ex gerente de PSV continuará declarando hoy. La larga duración de la comparecencia se debe a que las preguntas de los abogados y las explicaciones de Sotos están siendo exhaustivas. Según fuentes de la acusación, Carlos Sotos declaró que no sabía dónde estaba el dinero entregado por los cooperativistas, aseguró que el dinero se invirtió legalmente, achacó la falta de pisos a fallos en otras vías de financiación y resaltó la culpabilidad a UGT.

El abogado de los cooperativistas de Valdebernardo -la mayor promoción de PSV-, Joaquín Ruiz-Giménez, dijo en un descanso del juicio que estaba convencido de que Sotos tenía responsabilidades en la gestión de PSV y que el problema era probar las acusaciones. La querella tramitada por este abogado es por apropiación indebida y estafa. Francisco Méndez Goas, que representa a los cooperativistas del plan 18.000, coincidió en que hay indicios de la responsabilidad de Sotos. "Como dicen los franceses", señaló Méndez Goas, "los hechos son testarudos; y los hechos son que mis representados entregaron cantidades de dinero y no les dieron los pisos". Mientras, decenas de cooperativistas se concentraban en las inmediaciones de la Audiencia Nacional, manteniéndose alerta por si Sotos aparecía por la puerta. "Éste se lo va a llevar puesto", aseguraba una señora mostrando un huevo en su mano derecha que tenía como blanco deseado la figura de Sotos.