La Comisión de Valores exige a Grand Tibidabo que explique "su situación financiera real y actual"
La Comisión del Mercado de Valores (CNMV) ha requerido a Grand Tibidabo, sociedad controlada por el financiero Javier de la Rosa, que explique cuál es "su situación financiera real y actual" y que concrete cuándo pagará los intereses de las obligaciones, que debían haberse abonado el miércoles pasado. Grand Tibidabo ha contestado a la Comisión que el pago se producirá "no más tarde del día 17". Al cierre de esta edición, la empresa intentaba que La Caixa le conceda un crédito de emergencia.
Las necesidades financieras de Grand Tibidabo a corto plazo son de unos 2.600 millones de pesetas, de los que 1.000 millones son urgentes para evitar un agravamiento de la crisis antes de la junta de accionistas del próximo día 30.A consecuencia de ese impago la CNMV ha pedido a Grand Tibidabo información sobre las "causas motivadoras del retraso", su "situación financiera real y actual" y una relación detallada de todas las operaciones de ventas realizadas por la sociedad. Asimismo, ha inquirido sobre la auditoría, aún no finalizada. Según las fuentes consultadas, Grand Tibidabo intentará que este informe, cuyo borrador elaborado por Ernst and Young contiene una larga lista de notas, no trascienda hasta que se formalice el crédito de emergencia.
En su comunicado a la CNMV, Grand Tibidabo justifica sus problemas financieros con la venta de Tibigardens, la sociedad promotora del parque de atracciones de Tarragona, a La Caixa y el grupo británico Pearson. A pesar de haber ingresado 1.500 millones, la empresa argumenta "que una de las condiciones de la operación de venta impuesta por la parte compradora era la concesión de un préstamo de Grand Tibidabo a favor de Grand Península [nombre social de Tibigardens] por importe de 1.500 millones de pesetas. Dicho préstamo se documentó en un pagaré el cual quedó afecto, con afección real, a favor de Inmobiliaria Colonial y en función de garantía de los activos y pasivos de Grand Península".
Las necesidades financieras más urgentes de Grand Tibidabo, además de los intereses de las obligaciones, incluyen una ampliación de capital en la clínica New Teknon y el pago de un crédito hipotecario sobre la sede de la empresa, vencido y no cubierto, de 700 millones de pesetas. A estas cantidades se deben sumar deudas a Hacienda, y diferentes pagos aplazados a proveedores, como en el caso del parque de atracciones Tibidabo de Barcelona.
Ramon Espasa, diputado de Izquierda Unida-Iniciativa per Catalunya (IU-IC) pidió ayer que el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, y su consejero de Economía, Macià Alavedra, "expliquen el apoyo que dieron a Javier de la Rosa, al que pusieron como modelo de empresario".
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