El enviado especial de la ONU dice que es imposible un alto el fuego en Bosnia

"Salvo un milagro, es imposible obtener un acuerdo de alto el fuego en Bosnia". Así de claro se mostró ayer Yashusi Akashi, enviado especial de la ONU para el conflicto, que está harto de negociar siempre el mismo párrafo. Akashi advirtió ayer a serbios, croatas y musulmanes que, si no se producen avances significativos, hoy no habrá reunión en Ginebra. El problema se centra en determinar la duración del alto el fuego. Radovan Karadzic pide un año, aunque se conformó finalmente con cuatro meses. Akashi buscó fórmulas intermedias, y los musulmanes no desean más que cuatro semanas. Mientras se discute la letra pequeña, siguen los choques armados en varias zonas de Bosnia.

La paz se ha atascado en la primera dificultad. El alto el fuego general en todo el país que debe desembocar en unas posteriores y más complejas negociaciones para una reorganización territorial (sinóninimo de partición) de Bosnia-Herzegovina, no logra traspasar el umbral de la simple propuesta. Yasushi Akashi es cada vez más pesimista. "Hoy [por ayer] parece más y más difícil... continuaremos las negociciones mañana [por hoy] si hay una esperanza real. Si no veo posibilidad de acuerdo, proseguiremos en Sarajevo. Estoy deseando acabar lo antes posible".Mientras, el líder de los serbios de Bosnia, Radovan Karadzic, propone una tregua de un año y a última hora de la tarde de ayer se conformó con cuatro meses en "aras de la paz". Los musulmanes piden sólo un mes para evitar que las conquistas de los serbios, que se extienden al 70% de Bosnia-Herzegovina, se consoliden. El portavoz de Akashi, indicó ayer que los serbios estarían dispuestos a aceptar una tregua inferior a un año, aunque también admitió que un acuerdo definitivo sobre este punto está aún lejano.

Otro de los puntos en el que no terminan de ponerse de acuerdo es en el despliegue de las fuerzas de la ONU: mientras que los serbios piden que sean los cascos azules los que supervisen la zona desmilitarizada, los musulmanes prefieren a observadores.

Si ambas delegaciones se ponen de acuerdo sobre la tregua, sólo sería un primer paso. Lo más dificil queda por resolver: la división territorial definitiva de Bosnia-Herzegovina. Mientras que croatas y musulmanes reclaman el 58% del territorio para la federación, frente al 51% que le otorgan los planes internacionales, los serbios no se están mostrando muy dispuestos a devolver el 21% que les piden.

Llamamiento

De otro lado, una veintena de candidatos españoles al Parlamento Europeo ha suscrito un llamamiento en favor de las víctimas de la guerra en los Balcanes cuyo texto, entre otras cosas, señala: "Manifestamos en común nuestra voluntad de defender en las instituciones comunitarias los derechos de todas las personas que, sobre el territorio de la República de Bosnia-Herzegovina, sufren persecución y acoso. Medio siglo después de que Europa se liberase del fascismo, no podemos permitir que en ella triunfen el odio étnico, la intolerancia y la barbarie ( ... ). Nuestro propósito es solicitar el compromiso de la comunidad internacional para garantizar el fin inmediato de las agresiones a los civiles.

Firman: María Jesús Aramburu (IU), Ana Arillo (Poder Andaluz), Carlos Carnero (IU), Teresa Domingo (IU), José María Gil-Robles (PP), Laura González (IU), Antoni Gutiérrez (IU), Elena Ibáñez (PNV), Salvador Jové (IU), José María Mendiluce (PSOE), Fernando Morán (PSOE), Nuria Pelay (ERC), Alonso Puerta (IU), Branca Rodríguez (BNG), Pilar Salarrullana (Foro-CDS), Francisca Sauquillo (PSOE), María Sornosa (IU), Rosa Suárez (lcan-Coalición Canaria), José Luis Valverde (PP), Celia Villalobos (PP).