Elena Vázquez, "La ciudad estará CIU limpia de 'favelas' en dos años"
Ahora hay 1.100 familias en Madrid -unas 6.380 personas- viviendo en chabolas y a las que se les prometió una vivienda digna hace ocho años. La mayoría -811- se diseminan en cuatro grandes núcleos de favelas que son "la vergüenza de la ciudad" para las administraciones implicadas: 268 en Los Focos, 217 en el Cerro de la Mica, 109 en La Celsa y 217 en la avenida de Guadalajara. Estos realojamientos se consideraron "prioritarios" en 1986. El resto -hasta 1.100- no son "un problema", están muy repartidas en unos treinta pequeños campamentos. Los responsables del Consorcio para el Realojamiento de la Población Marginada defienden que a los 600 no censados "no se les debe dar vivienda", y creen que desaparecerán cuando se eliminen los poblados legales. En ese momento se habilitarán "albergues disuasorios" para arreglar los casos aislados que vayan surgiendo.La consejera de Integración Social, Elena Vázquez, es optimista respecto al futuro, y asegura: "Madrid estará limpio de favelas en dos años si se ponen los medios y el apoyo de las administraciones en la gestión urbanística". Se plantean dos sensibilidades políticas ante el chabolismo: la del Ayuntamiento (PP) y la de la Comunidad (PSOE). Vázquez las matiza más: "Hay que conjugar lo que planteamos los encargados de los servicios sociales y lo que quieren los urbanistas". El gerente del consorcio, Julio Fernández Mato, sostiene que, a la hora de los hechos -poner pisos-, todos se han demostrado igual de reacios.
Plan para seis meses
Fernández Mato ha elaborado un plan "para acabar en seis meses" con el grueso de los 1.100 chabolistas a realojar. Los políticos del Ayuntamiento y de la Comunidad se lo han exigido y él lo ha entregado esta semana."Las 268 familias de Los Focos las realojaría en viviendas en altura del Ayuntamiento, las 109 de La Celsa las metería en las 96 casas en obras, paralizadas por una suspensión de pagos, que se van a reanudar en verano más otros 13 pisos en altura de la Comunidad, a 100 de los 217 de la avenida de Guadalajara los dejaría en casas bajas prefabricadas de la Comunidad y a los otros 117 en viviendas en altura también de la Comunidad. A los del Cerro de la Mica los repartiría entre 80 viviendas en altura de la Comunidad y 137 del Ayuntamiento". Éste es el sueño de Fernández Mato.
Para cumplir este deseo ha requerido al Ayuntamiento y a la Comunidad que le entreguen ya un paquete de 400 viviendas. El Ivima se ha comprometido con sus 200. Faltan las otras 200 de la EMV, 100 prefabricadas que se podrían levantar en seis meses y 215 a obtener por un sistema de permutas con personas que habitan casas sociales en otras zonas de Madrid sin cupo de población marginada. El último pico -unas cien- se comprarían del mercado libre.
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