Leguina será el responsable de la creación de más emisoras y regulará las radios libres

El presidente regional, Joaquín Leguina, recibirá en los próximos días de¡ Estado una competencia materialmente menor, pero públicamente, de gran trascendencia. Leguina será el responsablede la concesión de nuevas emisoras de frecuencia modulada (FM) en Madrid. Además, decidirá sobre las 32 radios comerciales existentes, algunas pendientes de renovar esta concesión. El Ejecutivo autonómico, sin embargo, pretende esta competencia sobre todo para poner orden en el dial de las emisoras municipales y las libres o piratas. El PSOE ha presentado una proposición no de ley en la Asamblea para regularlas y plantea criterios novedosos, como dividir una misma frecuencia para varias emisoras según el horario o su zona de difusión.

Estas competencias están en su última fase de negociación y se concretaron definitivamente la semana pasada en Valencia, en unas Jornadas sobre radiodifusión sonora entre responsables estatales y de todas las comunidades autónomas afectadas.El trasvase se producirá durante el próximo mes de junio, según aclaró Isaac Moreno Peral, subdirector general de Concesiones y Control del Espectro Radioeléctrico. A partir de ese momento, Leguina -no se ha precisado todavía a cuál de sus consejerías corresponderá- tendrá el poder máximo de decisión sobre la concesión de nuevas licencias de FM, sobre los distintos requisitos o condiciones que se pondrán a los aspirantes, creará un registro de empresas radiodifusoras donde se podrá controlar el cambio de accionistas, y podrá aplicar inspecciones y sanciones sobre las emisoras que cometan determinadas infracciones.

En este último capítulo sancionador, el Estado continuará reservándose poderes suficientes para intervenir sobre sus intereses en el espectro radioeléctrico (interferencias sobre emisoras de aeropuertos, de la policía ...).

Problema

El Gobierno regional no ha resuelto -es ahora mismo el único escollo- qué consejería se hará cargo de esta competencia: pueden ser Cultura, la Dirección General de Medios de Comunicación o la Oficina del Portavoz. El Estado mantiene esta negocia ción con 10 comunidades de vía lenta (las del artículo 151. ya tienen esta competencia) y ya ha precisado el trasvase con cinco. La frecuencia modulada en Madrid está ocupada ahora mismo por siete emisoras estatales (RNE), dos autonómicas (Onda Madrid), 19 reservas para municipales y 32 privadas, lucrativas o de gestión indirecta. Los tres últimos apartados son los que se transfieren a la Comunidad, con el añadido de un capítulo hasta ahora no regulado -y por tanto ilegal- como es el de-otrasformas de radiodifusión" (libres o piratas). El Gobierno regional puede crear nuevas emisoras autonómicas, por ejemplo para emitir solamente información cultural, educativa o deportiva. La Comunidad tendrá a partir de junio potestad para autorizar o no el cambio de titularidad de estos negocios. Al señalar cuáles deben ser las condiciones para gestionar una radio, el Gobierno autónomo podrá marcar los límites de publicidad o imponer, en algunos casos, contenidos locales y no sexistas.

Los responsables autonómicos están especialmente interesados por las radios ahora en la alegalidad, entre 20 y 30, que ofrecen en Madrid desde programación alternativa hasta vecinal, cultural, ecológica o juvenil. Aunque emiten con potencias bajas y teóricamente no interfieren sobre los programas de las grandes cadenas, son un sector a regular. La Comunidad de Madrid presentó la semana pasada en Valencia una ponencia sobre este tipo de radiodifusión comunitaria y en ese texto se ha basado la portavoz socialista en la Asamblea, Dolores García Hierro, para registrar el pasado 16 de mayo una proposición no de ley ya admitida a trámite.

El PSOE quiere en principio que se corrija el actual Plan Nacional de Radiodifusión Sonora en ondas métricas con modulación de frecuencia para permitir la creación de nuevas emisoras para el uso social no lucrativo. A continuación la Comunidad debería definir los criterios a imponer a asociaciones, colectivos y organizaciones no gubernamentales que opten por las radios.Estos criterios ya están dibujados por la Dirección General de Telecomunicaciones, cuyo responsable, Javier Nadal, estuvo en las jornadas de Valencia, y serán asumidos por la Comunidad de Madrid.

El ámbito de cobertura de las emisoras culturales se limitaría por barrios o distritos dentro de una ciudad para reutilizar la frecuencia en otras zonas. Para ello se exigirá una potencia radiada máxima de 10 vatios y una altura de la antena de 20 metros. En las educativas, el ámbito se reducirá a los recintos escolares, con una potencia de cinco vatios y una antena de 20 metros.

Una misma frecuencia, además, podría repartirse por horas entre varias emisoras.