Gobierno de reconciliación

Nelson Mandela y Frederick W. de Klerk van a iniciar mañana sus primeras conversaciones oficiales sobre la formación del futuro Gobierno de Unión Nacional, un Ejecutivo de reconciliación y consenso con unos 27 ministros en el que, según la Constitución, debe estar representado todo partido que haya obtenido más del 5% de los sufragios en las elecciones. Esta Constitución provisional fue finalizada en noviembre y por entonces se pensaba que podrían entrar en el Gabinete ministros de varios partidos. Si se confirman las tendencias del escrutinio será poco menos que un Gobierno bipartidista, pues apenas habrá una presencia simbólica del zulú Partido de la Libertad Inkhata y del afrikaner Frente de la Libertad.Mandela, con De Klerk como uno de sus dos vicepresidentes ejecutivos, encabezará un Gobierno con el que buscará ganarse la confianza y la cooperación de la patronal, el funcionariado y las fuerzas de seguridad. Habrá cierta continuidad política con respecto al saliente. El nuevo presidente decidirá quiénes ocuparán qué carteras y los analistas políticos locales dan por hecho la continuidad del ministro de Defensa, Koble Coetsee, y del eficaz Derek Keys, que dejará Hacienda para encargarse de Comercio e Industria.

Se cree que seguirá como gobernador del Banco Central Chris Stals, de quien Mandela dice que ha aprobado el programa de reconstrucción y desarrollo (RDP), que será el pivote de la política gubernamental, con su plan para dotar a la mayoría negra de millones de puestos de trabajo, viviendas y servicios básicos. El Congreso Nacional Africano se reservará las carteras necesarias para dar fuerza al RDP, cuya realización dependerá de Jay Naidoo, un antiguo sindicalista.

Este Gobierno anunciará en cuestión de semanas una ampliación de la amnistía, de la que quedarán excluidos los que asesinaron en abril de 1993 a Chris Han¡, el secretario general de los comunistas.