Atentados xenófobos de neonazis alemanes en el 'cumpleaños' de Hitler

Ultraderechistas alemanes celebraron el 1050 cumpleaños del führer, Adolfo Hitler, a su manera violenta y xenófoba. En varias ciudades alemanas lanzaron durante la noche del miércoles al jueves bombas incendiarias contra residencias de trabajadores turcos o asilados políticos, sin causar víctimas. Los daños afectaron sólo a los edificios a consecuencia del fuego desatado. En una ciudad holandesa, al lado de la frontera alemana, un atentado contra una residencia de 200 asilados causó heridas a siete personas cuando saltaron desde el interior para huir de las llamas.

Mientras tanto continúa en Düsseldorf, con declaraciones contradictorias de los acusados, el proceso contra cuatro jóvenes que en un atentado contra una vivienda de turcos mataron a cinco mujeres en la noche del 29 de mayo del año pasado.En Berlín, el lugar donde se temía lo peor, no ocurrió nada. Suspendido el partido de fútbol Alemania- Inglaterra del miércoles desapareció casi por completo la tensión en torno al 1050 aniversario del nacimiento de Hitler.

Tan sólo se celebró una manifestación izquierdista de signo antinazi a la que asistieron unas 2.000 personas. La policía se limitó a detener a tres o cuatro de los que más alborotaban.

Con la llegada de la noche, mozalbetes ultraderechistas hicieron de las suyas en varios puntos de Alemania. En Bielefeld (Renania del Norte-Westfalia), un grupito de seis muchachos de entre 14 y 16 años cayeron en manos de la policía en la madrugada del jueves. Eran los presuntos autores del atentado con una bomba incendiaria lanzada a través de una ventana contra una antigua escuela convertida en residencia para 15 turcos. Los moradores se dieron cuenta del incendio y pudieron escapar a tiempo. El fuego quedó sofocado en poco más de media hora. Los daños se elevan a unos 12 millones de pesetas.

En una conferencia de prensa, la policía confirmó ayer que los autores eran ultraderchistas. Cinco de ellos confesaron su participación en el atentado y el sexto, el principal sospechoso, de 15 años de edad, se negó a declarar.

La Fiscalía ha abierto un sumario por incendio e intento de asesinato.

En Zeithain, Sajonia, en la antigua República Democrática Alemana, un joven lanzó una bomba incendiaria contra una residencia en la que dormían 200 refugiados políticos en espera de asilo. El artefacto se estrelló contra el cuarto piso del edificio. Los propios moradores apagaron el fuego. No hay rastro del autor.

En Bad Langensalza, un pueblo de Turingia (antigua RDA), la policía detuvo a ocho personas de un grupo que junto a la estación se dedicaba a corear gritos nazis y ondearon dos banderas de guerra del Reich.