El Gobierno se plantea endurecer las medidas contra la corrupción
Felipe González y su Gobierno están convencidos ya de que han perdido un tiempo precioso en el combate contra la corrupción. El Gobierno asume también que ha habido negligencia en el control de la Administración y está decidido a endurecer las medidas contra la corrupción con un mayor control y más fuertes condenas. Ésas fueron las conclusiones del debate del Consejo de Ministros del viernes, en el que se abordó la estrategia gubernamental ante el debate sobre el estado de la nación previsto para el próximo martes.
González presentará un nuevo paquete de medidas para tratar de contener la indignación y el desánimo social provocados por el escándalo Mariano Rubio. El reforzamiento del control de la Administración, el endurecimiento de las condenas para figuras delictivas como el cohecho (aceptación de sobornos) y la agilización de los procedimientos previstos en la Ley de Enjuiciamiento Criminal son algunas de esas medidas.Estas iniciativas, y una actitud pública más enérgica contra la corrupción, será lo que el Ejecutivo ofrezca para calmar la inquietud de los ciudadanos y frenar el intento del PP e IU de arrastrarle en el escándalo. El Gobierno no se ha planteado aún las posibles responsabilidades políticas derivadas del caso y no abrirá ese debate hasta que se aclare el caso Rubio.
Por su parte, José María Aznar, presidente del Partido Popular, consideró ayer en Palma de Mallorca que "la situación general del país es en estos momentos de grave descomposición y estamos bajo mínimos".
Para el líder popular, "las actitudes que desde hace tiempo está adoptando González están causando un perjuicio grave a España". El presidente de la Xunta de Galicia, Manuel Fraga, declaró que las elecciones generales "son urgentes ya", porque "el ambiente es irrespirable".
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