El Deutsche Bank demanda al constructor Schneider por estafa crediticia

El Deutsche Bank, uno de los principales bancos alemanes, ha presentado ante la Fiscalía de Francfort una demanda contra Jürgen Schneider y su esposa por sospecha de estafa crediticia. Schneider, propietario de una empresa inmobiliaria considerada como una de las mayores de Alemania, ha desaparecido con su esposa desde antes de Semana Santa y se ignora por completo su actual paradero. Tampoco se conoce el alcance de sus deudas, que ayer algunas fuentes bancarias estimaban ya en 10.000 millones de marcos (algo más de 800.000 millones de pesetas). Todo parece indicar que Jürgen Schneider recibía créditos con garantía de inmuebles que estaban valorados en exceso. Se estima que la mitad de la deuda del empresario fugado ha sido contraída con entidades financieras.

Los acreedores de Jürgen Schneider estaban reunidos ayer en Francfort para hacerse una idea de la situación, pero el Deutsche Bank se anticipó y tomó la decisión de acusar al empresario fugitivo por estafa. Se calcula que los créditos concedidos por el Deutsche Bank a Schneider ascienden a 1.300 millones de marcos (más de 100.000 millones de pesetas).

El banco se considera estafado por los datos facilitados por Schneider para conseguir un crédito de 415 millones de marcos (más de 34.000 millones de pesetas) para la compra de una galería comercial en la ciudad de Francfort.

Se espera que, en cualquier momento, la empresa de Sclíneider presente la solicitud de suspensión de pagos. Los gobiernos de los estados más afectados se esfuerzan por tratar de reducir los daños causados por la huida del empresario. En Leipzig, una de las ciudades donde Schneider había realizado más inversiones, existe el temor de que se queden sin trabajo más de 3.000 albañiles ocupados en algunas obras del empresario.

Algunos bancos se han mostrado dispuestos a continuar las obras de construcción iniciadas, pero advirtieron ya que se deben renegociar las condiciones. El presidente del estado federado de Hesse, el socialdemócrata Hans Eichel (SPD), se manifestó dispuesto a contribuir con garantías para evitar que pequeños empresarios se vean afectados por la desaparición de Jürgen Schneider y vayan directamente a la quiebra.

La televisión mostró escenas de obreros, en u n hotel en construcción en la ciudad de Wiebaden, que acudían con camiones a llevarse lo que podrían en un desesperado sálvese quien pueda. ¡Pánico! Miles pierden el trabajo", titulaba ayer a toda página el sensacionalista Bild, que insinuaba la posibilidad de que Schnelder se encuentre tomando el sol en Barbados, algo que los sufridos alemanes castigados por el implacable invierno no dejarán de envidiar.