La aprobación mayoritaria de la gestión de Sanjuán relaja la tensión en el congreso del PSOE andaluz

Los guerristas se resisten a ser barridos en Andalucía. La gestión de la ejecutiva saliente, de mayoría guerrista, fue aprobada ayer tarde con el 84% de los votos de los congresistas. Sólo hubo un 4,75% de noes y el resto se abstuvo. Agrupaciones renovadoras de nuevo cuño, como las de Huelva y Granada, votaron mayoritariamente a favor de la gestión del secretario general saliente, Carlos Sanjuán, lo que indica que las negociaciones para conseguir contrapartidas iban por buen camino en el momento en que se produjo la votación en el congreso del PSOE andaluz, que se celebra en Granada.

En la primera jornada del séptimo congreso del PSOE andaluz los guerristas consiguieron un voto minoritario en contra de la gestión de Sanjuán, tras llamara los congresistas a que valoraran su eficacia en los triunfos electorales que ha tenido el partido en Andalucía. La aprobación de la gestión de la ejecutiva saliente dirigida por Sanjuán fue una de las condiciones exigidas por los guerristas para un posible acuerdo para presentar una lista única al congreso y que Manuel Chaves y Carlos Sanjuán no concurrieran por separado.En el debate de gestión de la ejecutiva los guerristas tuvieron que escuchar el principal reproche de los renovadores, referido a la votación en contra de Carlos Solchaga como presidente del Grupo Socialista en el Congreso, propuesto por Felipe González. "Si llego a saber que ésa es la causa de todo este bochinche hubiera votado a favor de Solchaga", dijo Sanjuán. Otros guerristas, sin embargo, consideraron que este argumento, aun siendo la baza principal de los renovadores, -"habéis sido desleales con González"- no es del todo cierto, ya que la guerra hubiera sido la misma con o sin el caso Solchaga.

Mientras, González, inconscientemente, decepcionó a los renovadores, que contaban ayer con su presencia para que marcara la pauta a seguir en el congreso y, sobre todo, para que dijera en voz alta que Chaves debe ser el secretario general del PSOE andaluz.

El secretario general del PSOE, Felipe González, había comunicado anteayer al presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, la posibilidad de que asistiera a la primera jornada del séptimo congreso de los socialistas andaluces. En tomo a las dos de la tarde se supo definitivamente que no iban a poder contar con él. De esta manera, los renovadores tuvieron que seguir su trabajo solos, sin el espaldarazo que hubiera supuesto la presencia de González marcando las pautas del congreso.

Sólo si se prevé un final feliz se trasladará el domingo al Palacio de Exposiciones y Congresos de Granada para dar sus parabienes y pedir a toda la organización que apoye a Chaves como candidato a la presidencia de la Junta de Andalucía en los comicios del 12 de junio, y felicitarles por haberle elegido secretario general de los socialistas andaluces.

En esta primera jornada las formas se guardaron notablemente y los renovadores reconocían que el medido discurso de Carlos Sanjuán no dejaba demasiados resquicios para el reproche. El secretario general no hizo mención directa a que en este congreso lo que se dirime es su salida de la secretaría general y la de todos los suyos. El método dialéctico que utilizó fue el de alabar los buenos resultados que había obtenido el PSOE al haber separado el poder del partido al de las instituciones y dentro del primero la actuación colegiada y corresponsable. Con ello estaba advirtiendo que no tendría sentido que le votaran en contra de su gestión dado que muchos renovadores han formado parte durante cuatro años de su ejecutiva y nunca se han opuesto a ninguna decisión importante.

Los argumentos que ayer se escucharon en el congreso andaluz retrotraen al debate de guerristas y renovadores de meses atrás que, sin embargo, quedaron enterrados en el congreso federal de hace 15 días donde tan sólo se hablaba de cuántos guerristas y cuántos renovadores había en la ejecutiva.

"¿A quién se dirigen los socialistas? ¿Cuál es su electorado? ¿Qué significa abrirse a la sociedad?", fueron los interrogantes que Sanjuán dejó en el aire, aunque muchos reconocieron que las preguntas se dirigían a los renovadores Ele otras federaciones. Los guerristas andaluces mantienen que su apoyo sigue estando en las capas menos favorecidas de la sociedad. "Los sindicatos de clase y los campesinos son nuestra gente y en la defensa del Estado del bienestar está nuestro apoyo electoral", clamó Sanjuán.

No dejó en el tintero el crecimiento de militantes durante su mandato ni los sucesivos éxitos electorales en autonómicas y generales. "¿Cómo se mide el grado de apertura a la sociedad?". Se contestó Sanjuán: "Se ve por el apoyo electoral", en claro mensaje a los renovadores de otras federaciones que no cosechan el grado de apoyo que hasta ahora viene consiguiendo el PSOE andaluz.